Interesante noticia sobre como el tipo de parto afecta a la flora intestinal del recién nacido.
En el momento del alumbramiento, millones de microorganismos de miles de especies distintas se lanzan a colonizar el intestino del ignorante advenedizo. Este "ejército microvisible" acompañará a la persona durante toda su vida y tendrá un papel relevante en el desarrollo de su sistema inmune. Sus principales funciones incluyen:
actividades metabólicas como la producción de ácidos grasos de cadena corta y la absorción de nutrientes, efectos tróficos en el epitelio intestinal y en la estructura y la función del sistema inmunitario, y protegen al huésped frente a la invasión de microorganismos patógenos. Una de las características más sorprendentes del sistema inmunitario intestinal es su capacidad para distinguir entre los antígenos de la microflora y los de los patógenos. La microflora intestinal influye también en la expresión genética de las células presentadoras de los antígenos en el intestino.
Según un estudio (el mayor hasta la fecha) del Instituto Wellcome Sanger (dependiente del University College de Londres y de la Universidad Birmingham) el tipo de parto (si es vaginal o por cesárea) influye en la composición de la flora intestinal en las primeras semanas del niño.
- Los nacidos por parto vaginal obtienen la mayoría de la flora bacteriana de la madre
- Los nacidos por cesárea presentan más bacterias asociadas al entorno hospitalario y son más propensos a presentar resistencia antimicrobiana
El estudio usó 1.679 muestras de microbiota de casi 600 bebés sanos y sus madres. Las muestras fecales se recogieron de los niños a los cuatro, siete o 21 días y de algunos se hizo un seguimiento durante un año.
Es importante que el estudio concluye que la microbiota transmitida en partos vaginales proviene de la flora intestinal de la madre y no de la presente en sus fluidos vaginales por lo que se pone en duda la práctica de restregar una gasa impregnada en estos fluidos por la cara de los nacidos por cesárea.
A lo largo del primer año de vida del niño, las diferencias en la flora intestinal se van igualando "en gran medida" (un poco inconcreto y confuso esto pero está sacado de las fuentes). Aún así, consideran recomendable realizar nuevos estudios para, por un lado, reconfirmar estos datos y, por otro, comprobar si existe un impacto significativo en la salud.
Fuente en cristiano
Fuente en inglés
Enlace al estudio fuente (solo para suscriptores)
(y recomiendo el artículo del quote, mucho más interesante que estos 3 links -salvo que paguéis la cuota de nature y tengáis acceso al estudio fuente y no solo al abstract- pero no he entrado más en el tema porque sino se me iba el hilo de las manos xD)