Al principio de los tiempos, Dios, declara un último concilio para que justo antes del fin del mundo, se reúnan todas las
grandes entidades más importantes de la existencia. A este concilio llamado Kiahewa, asistirá Dios, el diablo, la
muerte, el arcángel san Gabriel y... la gravedad...
Pero poco antes de que se produzca, Esteban, un vigilante de seguridad muere en un estúpido accidente. Casualmente la muerte, que como es de esperar va en su busca, anda mal de tiempo por lo que no tiene más remedio que traérselo a este ultimo concilio en el que hablarán sobre la actitud del hombre y los por menores del cielo y el infierno mientras esperan el fin del mundo. Esteban será el único humano en Kiahewa.