La única diferencia entre lo que ha pasado en Osasuna y en Madrid es que uno tiene mucha atención mediática y el otro prefiere ser honesto y admitir la culpa propia antes de terminar de hacer el ridículo.
La única diferencia entre lo que ha pasado en Osasuna y en Madrid es que uno tiene mucha atención mediática y el otro prefiere ser honesto y admitir la culpa propia antes de terminar de hacer el ridículo.