Mal el Barcelona, que ha vuelto a tener ese síndrome de jugar caminando como si el partido les importase una mierda. En el minuto 88 dándose pasecitos en corto Busquets y los centrales, tela. Prácticamente toda la primera parte perdida, y solo han espabilado a partir del 60, que sí han creado unas cuantas muy buenas, pero eso hay que hacerlo desde el minuto 1.
Respecto a Osasuna, qué decir... Ya no es que sean guarros, que es ya algo habitual desde hace años, sino que realmente están de pena. Otros años eran al menos capaces de contener al Barcelona medio jugándole de tú a tú, presionando arriba, no dejando combinar al Barcelona y tal, pero es que hoy ni eso, directamente encerrarse atrás los once y a esperar el milagro. Lo peor de todo es que el milagro se ha dado.
Con un poco de suerte este año sí baja.