La Guardia Civil e inspectores de Trabajo han entrado en una decena de clubes por indicios de fraude en la Seguridad Social, cometido presuntamente en la Segunda B y Tercera, que actualmente son Primera, Segunda y Tercera RFEF. Se sospecha que se podrían haber hecho cobros en negro y cotizaciones muy por debajo de las cantidades percibidas por los futbolistas.
Esto afectaría al dinero que tendría que haber llegado al Estado y a los propios jugadores. Hay indicios de que el dinero ganado en la taquilla y con los patrocinadores no está siendo correctamente declarado y se puede estar cobrando también en B y no siendo declarado como lo impone la ley. Se investiga contrato privado que se han hecho sin cotización. Y que han afectado por ejemplo a la cantidad de dinero que recibían los jugadores en su ERTE en la pandemia.
Los clubes en los que han entrado o entrará la Guardia Civil son Cartagena, ahora en Segunda División, y del Hércules, Linense, Calahorra, Salamanca, Mérida, Extremadura, La Nucía, o Atlético Sanluqueño. Y no solo se sospecha del primer equipo si no también de los filiales. Se inestiga también que haya llegado algún capital del extranjero y que se haya hecho blanqueo.
El objetivo de la investigación es obtener de estos clubes documentos que revelen estos posibles fraudes. Toda la investigación ha surgido por una carta dirigida a la RFEF por parte de once clubes de Segunda B que puso en alerta a la Guardia Civil.