Dos días después de que la selección española de fútbol ganara la Eurocopa, el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) ha decidido inhabilitar durante dos años al presidente de la Federación Española de Fútbol, Pedro Rocha. Una decisión que implica que Rocha deberá dejar su cargo de forma inmediata, salvo que prosperen las medidas cautelares que, con seguridad, reclamará ante la Justicia ordinaria.
Aunque la propuesta de sanción era de seis años (tres diferentes de dos años), finalmente el TAD ha decidido inhabilitarle por dos años por haber despedido a quien era el secretario general de la Federación, Andreu Camps. Las sanciones propuestas por prescindir del abogado externo Tomás González Cueto y por personar a la RFEF en el proceso judicial que investiga la presunta corrupción durante la presidencia de Luis Rubiales se quedan finalmente en una multa económica de 16.000 euros por cada uno de estos hechos.
Esta sanción se produce debido a una denuncia del presidente de la escuela de entrenador CENAFE, Miguel Galán, que el Consejo Superior de Deportes elevó al TAD. Después de tres meses de instrucción, este tribunal ha determinado que Rocha realizó un abuso de poder durante su larga etapa como presidente de la comisión gestora de la RFEF, cargó que asumió después de que Luis Rubiales, de quien era vicepresidente económico, se viera obligado a presentar su dimisión.
Salvo que la Justicia ordinaria diga ahora lo contrario, María Ángeles García 'Yaye' asumiría ahora la presidencia de la RFEF hasta la celebración de elecciones ordinarias a la presidencia, ya convocadas para el mes de septiembre. Rocha no podría presentarse a esos comicios mientras siguiera en pie su inhabilitación.
