Como operador dominante en el mercado, al concentrar casi el 80 % de los ingresos de la televisión de pago en España, Telefónica está obligada a ofrecer sus contenidos "prémium", entre ellos el fútbol, a sus competidores, que pueden adquirir el 50 % de esa oferta a precios regulados.
En su oferta mayorista para la próxima temporada, Telefónica pone a disposición de sus competidores seis canales -Movistar Partidazo, Movistar Champions (y Liga Europa), Movistar estrenos, Movistar series, Movistar Moto GP y Movistar Fórmula 1-, y Vodafone ha decidido solo adquirir dos: el de cine y el de series.
El director general de Particulares de Vodafone España, Andrés Vicente, ha estimado que, a los precios actuales, el coste de los contenidos de fútbol (Champions, Liga y partidazo) asciende a unos 1.340 millones de euros que hay que repartir "entre los actores que decidan comprarlos", por lo que si uno de ellos decide salir, lo que deje de pagar, repercutirá en el resto.
Vodafone, con 300.000 clientes que tienen contratado algún paquete de fútbol, gastó el año pasado 250 millones en contenidos de fútbol, que ahora se repercutirán al resto de compañías interesadas que sí adquieran estos canales, según el directivo.
Vicente ha explicado que su compañía cambiará su posición "inmediatamente" si el modelo de comercialización deja de estar basado en mínimos garantizados -las compañías pagan un mínimo independientemente del número de clientes de fútbol que se tengan- y se basa en número de clientes efectivos, por considerar que es "un modelo más eficiente para toda la industria".
Ha insistido en que, desde un punto de vista de racionalidad económica, su operadora prefiere renovar contenidos de la oferta que son accesibles a todos sus clientes que optar por el fútbol, que tiene una penetración del 23 % en su base de clientes de televisión (1,4 millones).
"Lo que digo es que para un segmento muy, muy estrecho, no tiene sentido desde un criterio de racionalidad económica", ha añadido.
Ha explicado que cualquier operador puede solicitar en cualquier momento a Telefónica el acceso a los canales mayoristas y ahí se produce un ajuste de los importes, ya que si entra un actor nuevo, se reducen los costes para el resto.
Ha asegurado que, tras los "muchos análisis" efectuados y repasar su propia experiencia, han concluido que el fútbol "no es el contenido más demandado por sus clientes" y que hay "más apetito" en cine y series.
"Si cogemos a qué precios ha vendido LaLiga los derechos a Telefónica, el coste que debería pagar cada cliente de fútbol está próximo a los 50 euros. No creemos que haya demanda para que un cliente quiera pagar eso", ha dicho.
Telefónica se ha hecho, por unos 4.000 millones de euros, con todos los contenidos del fútbol, al adquirir los derechos de emisión de LaLiga para el mercado residencial para las tres temporadas de 2019 a 2022 por 2.940 millones, y comprar a Mediapro los derechos de la Liga Campeones y la Liga Europa en el mercado residencial para las próximas tres temporadas por 1.080 millones.
El directivo de Vodafone ha denunciado que el precio del fútbol se ha incrementado un 15 % y ha abogado por poner "sensatez" y "racionalidad" en este sector.