#6094 Caer en el coleccionismo es ofensivamente fácil xD,. Sé fuerte. Las normas que ha puesto Norg son perfectas y (por mi parte) imposible de seguir por puro consumismo, pero incluso los casos perdidos podemos buscarnos truquillos:
Ten una wishlist, pero una de verdad, de la que todo lo que metas ahí lo vas a comprar (con asterisco), te va obligar a ser selectivo porque vas a ver todo lo que va a sangrar tu cartera por el siguiente motivo: al lado de cada título pon el precio, y al lado, la mejor oferta que hayas visto (sea nuevo o de segunda mano, si eres de los que les da igual destroquelar).
El mantenimiento de la wishlist es sencillo:
Si un juego deja de llamarte, fuera con él.
Marca un tamaño máximo (corto, no más del 10% de tu ludoteca) y sigue la norma de la estantería, para que uno entre, otro sale.
Mantén actualizada la oferta más baja. Eso hará que te lo pienses dos veces antes de comprar un precio que duela más al bolsillo.
Ir trabajando la wishlist sacia bastante la pulsión de compra, y sobre todo te pone un espejo delante cuando eliminas juegos de ella porque se te pase el hype por ellos.
Otro truco sucio es prohibirte comprar novedades por el mismo motivo. Espera a que se contrasten en el mercado (da igual que en Alemania o Usamérica hayan sido un bombazo), espera a que todos dejen de hablar de él. Mírate partidas. Son más aburridas que las reseñas, pero ayudan mucho a descartar.
Y sobre todo practica el noble arte de vender lo que ya no vea ni vaya a ver mesa.
A medida que pruebas más y más títulos encontrarás que juegos que al principio te entusiasmaban ahora te resultan insulsos, no por haberlos quemado sino porque son pobres de mecánicas o de diversión. A medida que ganas perspectiva, esa sensación de que todo lo que no conoces es flipante se va difuminando.
Por contra, tienes los regalos de tus pitufos arreglados para los próximos 10 años xD
¡Suerte!