El juego es divertido, pero como todo lo que hace Blizzard últimamente está muy incompleto. La sensación que da es de ¿Y ya está? cuando juegas unas pocas de rondas. La ausencia de sistema de rankeds es insultante de cojones, uno de los mayores atractivos actuales de prácticamente todo juego multijugador medianamente serio.
Pero qué notas esperabáis, los reviewers cada vez más son gente de la peor calaña informativa y los aspectos por los que se valoran los juegos hoy en día tienen poco que ver con la calidad jugable.
Tumblrina, check.
Negros, check.
Diversidad de sexos, check.
Bromas políticamente correctas, check.
Carne de streamers/youtubers, check.
Skins, check.
GOTY 2016.
Los maletines son un mito. Todo esto es un stunt de relaciones públicas del tamaño de una catedral de grande y en el trenecito en el que todos se la meten los unos a los otros, los medios mainstream siempre hacen de locomotora.