Hay mucha facilidad para publicar un libro. De hecho, si uno se sube a un escenario, puede tener la consideración de artista. Aunque haga turismo por el escenario, los demás lo ven como un artista.
La Literatura se está convirtiendo en un arrepentimiento académico, dar sentido al trabajo que no te gusta como a tu currículum. Es una auto-oposición que uno aprueba y siendo el número 1.
Seguro que conocéis a alguien que publica un libro, y necesita sentirse integrado en la Generación del 98. Da igual que el libro no tenga calidad, lo importante es tener fama de escritor.
Sobre todo, los personajes que salen en la televisión, o los youtubers. La calidad literaria ya tiene su propio sello en la sociabilidad.