Buenas amigos,
Os cuento, he tenido que volver a casa de mi madre con mi perro, un galgo de 10 mesecitos que adopté en verano. El problema es que mi madre no soporta los perros y dadas las circustancias me dejó tenerlo en casa a ver como iban las cosas. Pues bien el perro al principio era un trasto, supongo que debido a la mudanza; se comía papeles, un par de ratones del ordenador mios, unos cascos tambien, etc...algo tipico para un cachorrete de su edad.
Mi madre no le gustaba un pelo esta situación y me iba adviertiendo de que no podría seguir asi hasta que esta semana ha sido la gota que colmó el vaso y se ha cargado el nórdico de mi cama y el mueble de la misma...
El perro se quedaba en mi cuarto cuando no habia nadie en casa y gracias a ejercicios que hice para evitar la ansiedad y el kong y demas se fue calmando y cada vez liaba menos pero después de ésta ultima mi madre esta estresadísima porque los fines de semana se tiene que ir a cuidar a mis abuelos y yo curro algunos también y no esta tranquila con el perro en casa así que me dijo que el perro se tenia que ir sí o sí (despues de una bronca monumental que tuvimos). Ahora mismo el perro esta pasando el fin de semana en una residencia canina mientras yo trabajo (trabajo 12 horas los fines de semana que me toca currar).
Ahora bien había pensado en comprarle un trasportin y hacer de él su cama para cuando no estemos ninguno en casa pero no se si será excesivo meter a un perrete con sus juguetes y demás 8 horas en un tasportin...o quizá esten bien y yo exagere, no lo se.
La otra opción es mudarme con él a la casa dónde vivía con mi ex,casa que él ya conoce y mas o menos puede estar allí bien sin romper nada.
Y la última y la que menos quiero tomar, es devolver el perro a la protectora donde lo adopté
¿Algún consejo?
Aqui os dejo una foto de mi torbellino:
Un saludo.