Os cuento las desventuras que mi pobre perrete lleva sufriendo desde julio más o menos, a ver qué opináis (y de paso me desahogo porque estamos un poco superados). Tocho alert.
Toda esta historia empezó en julio. Un día así de buena mañana le dio por vomitar bastante y empezó a tener unas diarreas bastante extrañas, eran rojizas, como mezcladas com sangre. Ese mismo día lo llevé a la consulta del veterinario y le hicieron una placa y lo exploraron y me dijeron que parece una gastroenteritis y le dimos antibióticos y antieméticos y una dieta especial (al principio era especial digestiva y luego creo que me dieron pienso hipoalergénico). A las 3 semanas lo llevó mi hermano a revisión y le dijeron que podía ser una posible intolerancia alimentaria (probablemente a la carne de pollo sobre todo) porque al explorar el abdomen se defendía y no se qué (esta parte de la historia la tengo un poco difusa porque me pegué todo agosto fuera de prácticas y solo se lo que mi hermano me contaba). Le dábamos pienso hipo con alguna excepción (fruta, verdura, nunca carne). Hasta aquí normal, la historia viene ahora.
Así estuvimos hasta noviembre, como no sabíamos si era una intolerancia o una gastroenteritis mi hermano y yo decidimos reintroducir un poco de pienso normal a ver qué pasaba, "si le sienta mal pues se lo quitamos, fácil jeje". Si vamos fácil mis cojones, volvía atrás en el tiempo y nos daba dos ostias con la mano abierta. El pienso no lo toleró bien y una noche hizo unas diarreas horrorosas con vómitos y hasta un prolapso rectal. Mi hermano se lo llevó pitando al hospital veterinario y allí se lo pudieron reducir con un apósito con azúcar y cerrando el ano en bolsa de tabaco. Le quitaron los puntos a los cinco días y le dieron el alta.
Estuvo bien un mes y hasta conseguí que más o menos recuperase su tránsito intestinal habitual hasta que hace 15 días a mi madre se le ocurrió darle un trozo de cartílago de cerdo a pesar de que le dije que no lo hiciese. Pues vuelta a empezar, a la mañana siguiente me lo encontré con diarreas y un prolapso, pero esta vez no se lo pudieron reducIt y se llevó una intervención para reducir el prolapso y de paso hacer una colonopexia para que no recidivase. El pobre se volvió a casa con antibióticos y 30 grapas. Se las quitaron hace menos de una semana.
Ayer a mediodía en un despiste metió la cabeza en el cubo de la basura y sacó unos huesos. Se los hice escupir, pero algo debió comer porque me he levantado a las 2 y media de casualidad porque lo oía muy inquieto y OTRA VEZ UN PROLAPSO, se había cargado hasta la pexia del tenesmo que tenía. He cogido el coche y me lo he llevado a urgencias, de ahí he llegado hace media hora. Esta vez se lo han podido reducir con los apósitos de azúcar, pero se ha quedado ingresado para que lo vea el cirujano mañana, y según consideren igual reintervienen.
¿Alguien ha visto o ha tenido un perro con un problema parecido? ¿Si es así se os ocurre alguna recomendación? Ya se que está muy relacionado con la carne, pero mi perro tiene 6 años y jamás había tenido ningún problema de salud. También quiero añadir que desde el primer prolapso el ritmo intestinal le ha cambiado muchísimo, hace muchísimas deposiciones y más bien tirando a blandas y con moco. Supongo que será porque la mucosa está tocada y costará que vuelva a lo normal, pero me mosquea.
Me voy a dormir un rato, gracias por molestaros en leer el ladrillo.