"MIS RIVALES REZAN PARA QUE ME VAYA A LA F-1"
Valentino Rossi en estado puro: divertido, sincero y apasionado en lo que hace y lo que dice. Seguirá en las motos mientras tenga motivaciones y reconoce que Alonso le ha decepcionado al no aceptar su reto. Un campeón único
Me estoy dando cuenta de que el amarillo de su ropa se parece mucho al de la camiseta del Villarreal
(Se ríe) Déjeme sufrir en paz, por favor, porque la eliminación del Inter en cuartos de la Champions ha sido una gran desilusión para mí.
Entiendo bien de lo que habla. Yo soy madridista...
También su equipo está hecho una pena.
En el fútbol que tanto le gusta, tres partidos seguidos con derrota ya suponen una crisis y usted, sorprendentemente, lleva tres carreras sin vencer. ¿Se puede decir que está en crisis?
Es verdad que llevo tres carreras sin vencer, pero las dos últimas del año pasado fueron una situación un poco particular. Este campeonato es muy largo y veníamos de ganar el título de marcas para Yamaha en Australia y el de pilotos en Malaisia, así que mi motivación no estaba al cien por cien. Hubo un poco de relajación en mí, en el equipo, en todo. Seguro que ahora nuestra situación no es la mejor porque hay un montón de nuevos pilotos muy veloces y tenemos algunos problemas con la moto. No estamos en nuestra mejor forma, pero tampoco estamos en crisis.
Su anterior racha mala fue en 2003, cuando estuvo cuatro carreras sin ganar. Al volver a hacerlo, lo celebró disfrazándose de preso y picando piedra. ¿Tiene previsto hacer alguna de las suyas si vence aquí?
Ahora no estamos en la misma situación de entonces. Yo me siento fuerte, pero sabemos que tenemos unos problemas de vibraciones en la moto. La nota positiva de los primeros entrenamientos en Qatar es que ha desaparecido ese chattering de Jerez, pero lo malo es que no sabemos por qué lo ha hecho. Lo de Brno sí fue una cuestión anímica.
En Jerez se cayó en la primera vuelta y el público español lo celebró con alegría. ¿Se dio cuenta de ello?
Cuando voy en la moto no noto esa sensación, pero seguro que, con la llegada de Pedrosa a MotoGP, en España he pasado a ser el rival. Pienso que es algo normal, pero también creo que los aficionados españoles, y no sólo en Jerez, se han portado siempre muy bien conmigo. En la vuelta que di después de caerme, vi como todos me aplaudían.
¿Qué le empujó a subirse de nuevo a la moto?
Al principio estaba muy enfadado con lo que había pasado, pero pronto me di cuenta de que, si lo intentaba, igual podía coger algún punto para el campeonato, porque sé que va a ser muy igualado, que se decidirá en la última carrera y puede que esos dos puntos me ayuden.
¿Recuerda que, el año que ganó el título de 250, Alzamora consiguió el de 125 por un solo punto?
Claro que lo recuerdo... y yo cogí dos en Jerez.
Yo soy de los que no quiere que Valentino Rossi se vaya a la Fórmula 1. ¿Qué podríamos hacer nosotros para convencerle de que continúe en MotoGP?
No lo sé.
Quizá sugerir que Dorna recuperase en los circuitos la figura de su idolatrada Elsa Pataky como reclamo o que ficharan a Angelina Jolie como nueva de jefa de prensa
(Se parte de risa) A Angelina nunca la he visto de cerca, pero a Elsa sí y me parece una muy buena idea porque ella es una de mis preferidas. Lo que pasa es que siempre que la vi era la novia de mi amigo Fonsi y nunca pude hacer nada con ella.
Sus rivales deseaban en 2004 que se fuera de Honda a Yamaha. ¿Qué cree que quieren que haga ahora?
Estoy convencido de que todos los pilotos de MotoGP estarían muy contentos si me fuese a la F-1, es más, seguro que rezan por la noche antes de dormir para que me vaya de las motos. Es normal porque para ellos sería deshacerse de un gran rival en la pista, pero lo que yo quiero hacer es lo que me dicte mi corazón y mi pasión. Mi gran pasión, sin ninguna duda, es montar en moto.
¿Cuándo conoceremos esa decisión acerca de su futuro?
No lo sé exactamente, pero supongo que durante los seis primeros meses del año.
¿Y cuál puede ser el mayor obstáculo para que dé el paso?
El ambiente de la Fórmula 1 no es igual que el de las motos y creo que está muy lejos de lo que es Valentino como persona. Eso sería el mayor obstáculo.
¿Sería una motivación para seguir en MotoGP el cambio de cilindrada que va a haber a 800cc e intentar ser campeón en cinco cilindradas distintas?
Encontrar la motivación para mí es más difícil de hacer que para uno que todavía no ha ganado, pero eso no es un problema porque me siguen motivando las carreras.
¿Le ha decepcionado que Alonso no acepte su reto?
-El reto era fantástico, pero creo que él ha pensado antes de hablar. Dijo que si entrenaba mucho podía acabar haciendo el tiempo mío o de Dani, y eso es imposible. Le lancé un reto en el que había dos asaltos con coches, pero dijo que no tiene tiempo. Sí que es una decepción.
¿Le ve como el máximo favorito para repetir título?
Ahora se le ve pilotando muy fuerte y es el más rápido, pero creo que Alonso debería ser más elegante en sus entrevistas y comprender qué es un campeón del mundo de la Fórmula 1.
¿A qué se refiere?
Leyendo sus entrevistas (se calla y pone mal gesto).
¿Acaso le ve como a Max Biaggi, su eterno enemigo?
No lo sé porque no le conozco personalmente. No le he visto comportándose con la gente en general y con el aficionado.
¿No cree que Alonso es el Rossi de la Fórmula 1?
No, seguro que no. Yo cuando viajo por el mundo siempre me encuentro con fans de todas las partes. Esta es la gran diferencia entre Alonso y yo.
Le sorprenderá que aún no le haya preguntado por Pedrosa a estas alturas de entrevista.
La verdad es que sí que me parece increíble.
¿Le ve como su sucesor o su mayor amenaza del presente?
Pedrosa no será el Rossi del futuro porque será el Pedrosa del futuro, porque él es muy diferente a mí. No digo que ni peor ni mejor. Tiene mucho talento para ir en moto y ganará muchas carreras a partir del próximo año. Ya este año será peligroso para el campeonato.
¿Sigue su buena relación?
Sí. Yo le conozco desde que era incluso más pequeño de lo que es ahora. Cenó conmigo la noche que gané el título de 500. Creo que es un poco tímido, pero que no es mal chico.
¿Le planteará una guerra psicológica como las que ya tuvo con Biaggi y Gibernau?
Para mí, lo más importante es lo que sucede en la pista. Si en ella uno es más veloz, lo demás da igual. Yo tuve una guerra, bueno, no fue exactamente una guerra, con Biaggi y Sete porque no me gustaba lo que hicieron conmigo. Antes de mis problemas con Gibernau, me llevaba bien con él, pero hizo una cosa en Qatar que estuvo mal y se acabó para mí. Pero con Pedrosa espero que no suceda algo parecido.
¿Le dolería más una victoria de Sete con Ducati?
(Se ríe y duda) Más o menos. Yo espero que Sete no gane nunca más mientras que yo esté aquí, pero no deja de ser un rival como los otros.
¿Sabe que me decepcionó coincidir con usted en un gimnasio malayo el pasado invierno? Pensé que no le hacía falta pisar estos locales...
Eso son cosas de los periodistas italianos pero, en realidad, tengo el trasero pelado de ir tanto al gimnasio.