Me estoy imaginando que mañana García Albiol, en plena campaña contase una historia sobre cómo unos independentistas catalanes intentaron agredirle en dos ocasiones.
Una vez uno muy grande, cerca de sus casa. Le desafiaba y le llamaba facha. Pasó mucho miedo.
La otra vez fue una ocasión en que andando por la calle salieron dos independentistas con sus esteladas de detrás de un coche y se dirigieron hacia él. Afortunadamente justo en ese preciso instante pasó un coche de la Guardia Civil y se marcharon corriendo. Pero estaba seguro de que iban a pegarle una paliza o algo peor.
Cuando fue a los Mossos a denunciar estos gravísimos hechos, le riñeron por salir a la calle siendo del PP, en una clara provocación a los demás.
Y según me imagino esto, no me cuesta nada imaginarme a los guardianes de la moral como #181 o #183 partiéndose el culo de Albiol y sus chorradas.
Y yo también me reiría, porque sería igual de creíble que lo que cuenta Ada Colau aquí ahora.