Demuestra tu lo contrario. Yo no necesito hacerlo
Claro que tienes que hacerlo. La carga de la prueba está en el que propone políticas activamente. Hay una montaña de estudios que evidencian sitios donde subir el SMI ha sido una política regresiva, otros donde no, es una política cuyo éxito depende muchísimo del mercado laboral y de las condiciones donde se aplique, y en España de momento no parece ser la política adecuada, según los únicos análisis de los que disponemos al momento.
Si pagas menos tienes menos capacidad adquisitiva, tendras mas problemas para pagar una casa, gastos o ahorrar, VAYA LO QUE YO AFIRMABA...
Es que caes en el error, por manipulación o simple estupidez, de creer que una subida del salario mínimo es una subida del salario, y no lo es. El SMI es un control de precios que, como una de sus consecuencias, puede causar subidas de salario (el efecto positivo), pero como otra de ellas, puede causar la pérdida de un puesto de trabajo (el efecto negativo). Evaluar la idoneidad del SMI para un mercado particular radica en saber si la compensación de todos sus efectos va a ser netamente positivo, es decir, si la masa salarial sube. Otro efecto negativo pero aún más dificil de medir es la inflación, es decir, qué porcentaje de esas subidas se va a trasladar a los precios de los productos finales, que afectan tanto a los perceptores del SMI (que recibirían un cambio neutro respectivo a esa comodidad) como al resto de personas, perjudicándolas.
Si tu subes el SMI, y de cada 4 trabajadores afectados a 3 les suben el sueldo un 15% pero otro pierde el trabajo. Has destruido empleo, bajado la masa salarial, y aumentado la desigualdad. Pero además esto evidencia los incentivos perversos del SMI desde el punto de vista político, ya que en este caso concreto ha aumentado la desigualdad y reducido la masa salarial en global, pero más personas se han visto beneficiadas a simple vista que no, razón por la que se convierte en una medida altamente popular aunque generalmente inefectiva.
#400 Pues con análisis empíricos de sitios donde se hayan empleado esas políticas, y medir el parecido de esos mercados laborales con el español. Es curioso que los que vais con la cantinela del fundamentalismo neoliberal y los dogmatistas del mercado sois los primeros que os meáis en el empirismo y la econometría para colar lo que la Yoli os ha dicho que es bueno, y rechazar cualquier cosa que diga lo contrario asumiendo que están a nómina del FMI.