Ciudadanos sube porque prefirió apostar por el medio-largo plazo y ha sabido jugar sus cartas con bastante más tino que el resto de fuerzas. Ahora mismo C's será el partido que la ciudadanía ne general identifica como el menos malo, y eso es una gran ventaja. Además no se metieron en ningún gobierno como socio minoritario ni mayoritario, lo que les ha evitado el desgaste del poder y la crítica fácil a la gestión (que PP o Podemos sufren a diario). También hay que reconocer que C's está capitalizando de forma excelente el tema catalán, al no tener responsabilidad de ningún tipo puede presentarse como guardián de las esencias de España; pero cuando Cataluña se calme y salga del candelero veremos cómo de bien han sabido aprovechar esta ventana de oportunidad (en mi opinión deberían forzar elecciones en Andalucía que es una plaza que veo asequible para los naranjas).
Podemos cae y seguirá cayendo mientras no se den cuenta que la ventana del 15-M se cerró hace ya tiempo y que no tiene sentido creer que España sigue igual que entonces. El período de movilizaciones por temas sociales dejó de estar en el candelero desde las elecciones generales, las mareas educativas o sanitarias ya no tienen tanta repercusión; pero, desde Podemos parecen no darse cuenta. Buscan nuevos indignados en el feminismo que les permitan recuperar terreno, pero apoyan a sus corrientes más radicales y no generan una demanda transversal. Veremos si son capaces de capitalizar el descontento de los pensionistas (que no lo creo) y si remontan el vuelo, pero Iglesias está llevando el partido hacia una IU 2.0 y eso termina en la completa irrelevancia.
Al PP ya solo le quedan los fanáticos, que son muchos gracias a las derivas de la izquierda de los últimos lustros. Si la izquierda no hubiera tenido un discurso tan sectario en ciertos momentos el PP no contaría con tal cantidad de irreductibles que no se fían de los partidos de izquierda. Este espectro va poco a poco disminuyendo y quizás la corrupción termine por lanzar a buena cantidad de votantes azules a las manos de C's, aunque habrá que ver cómo los intentan seducir los naranjas. Mientras Rajoy tenga secuestrado el PP no será posible que este remonte el vuelo a nivel nacional, y cuando el PP se dé la ostia (que se la dará) las distintas taifas que conforman el partido prepararán una que ni lo del PSOE del año pasado.
De momento, el único escollo de C's en su camino a la Moncloa son los partidos nacionalistas, que acostumbran a tener la llave. PNV, CiU (o como se llame ahora), ERC y Bildu son los únicos que pueden evitar que C's entre en el gobierno. Aunque quizás Pablo Iglesias decida no seguir hundiendo a su partido y dé un paso a un lado, dejando entrar a un equipo que entienda qué ventana se ha abierto desde la crisis catalana...