Vamos, que no se puede votar si se quiere formar parte de España, y tampoco se puede llevar una bandera expresando esa idea.
Y a todo esto la persona encargada de dar el visto bueno, hija de uno de los fundadores de la Fundación Francisco Franco.
Yo llenaba el campo de banderas de la II República para ver si tenían cojones a no dejarlas pasar.