Lo más grave de todo este asunto es que se permita calumniar con una facilidad tan ridícula sin ningún tipo de prueba, y por lo visto, sin consecuencias para quien acusa.
Que se permitan y se den por válidas acusaciones tan graves como las que se hacen, y que sea el acusado quien tenga que probar su inocencia, es algo tan ridículo que no llego a comprender.
Si mañana me pongo de acuerdo con varios amigos y abrimos unas cuentas de tuiter diciendo que X cantante femenina estuvo dando un concierto en mi provincia el año Y, y que nos besó y manoseó sin permiso previo, haciéndonos sentir oprimidos y todas las mierdas que sueltan las nenazas y los maricas de hoy, ¿a que ahí no ocurriría lo mismo?, ¿a que me comería una denuncia millonaria con cárcel por parte del bufete de abogados de esa señora?, ¿a que todo tuiter diría que la culpa es nuestra porque nuestros padres nos visten como chulos?, ¿a que más de una diría que éso es el empoderamiento de la mujer, y que somos unos opresores y unos machistas por quejarnos?.
No, la ley no es igual para todos. Que a unas petardas se les permita DESTROZAR la carrera de alguien como Placido Domingo debería ser delito.