Seguimos con Aristóteles, que hasta donde sé, más que discípulo directo de Platón, fue estudiantes de su academia en Atenas, pero al fin y al cabo alumno suyo. Y es que sin duda, no habría filosofía Aristotélica como la conocemos si primero no hubiera existido la Platónica.
Básicamente, toda la filosofía del filósofo estagirita (era de dicha polis en la región de Macedonia, como Alejandro Magno, su más conocido discípulo) nace de la crítica constructiva a los postulados de Platón.
Vayamos por partes para introducirnos en el pensamiento Aristotélico
Ontología
Aristóteles rechaza la existencia de dos mundos, utilizando un principio muy científco, el de parsimonia; explica que para entender el mundo no es conveniente ni sensato recurrir a dos. El mundo es uno, sí; pero lo real se divide en Ideas (o Formas) y Materia. Para que algo exista, han de estar unidos ambos entes ontológicos: la Materia sin una Idea es una masa amorfa, y la Idea sin una sustancia que la traiga al mundo, es un sueño en la cabeza de alguien.
Pero recordemos la crisis creada por Heráclito (el cambio es la constante de todo) y Parménides(el ser no puede moverse o cambiar). ¿Cómo lo resuelve Aristóteles si el mundo son Formas y Materia revueltos en vez de separados, como Platón? Utiliza conceptos muy complejos, pero inteligentes, para explicar el fenómeno del cambio:
- lo que tiene unida la Forma a la Materia es el pulso entre la Entelequia y la Energeia. Dicho de una manera muy sencilla y sin entrar en profundidades, la primera es a lo que los entes tienden a ser, y la segunda cuando alcanza dicho estado de plenitud para luego iniciar así una fase (lenta o no) de profunda transformación
- las cosas puedes ser en acto (lo que son ahora) y en potencia (lo que serán más adelante gracias a ese pulso entre la Entelequia y Energeia)
Todo es más sencillo con ejemplos, y pongamos uno biológico, porque Aristóteles es ante todo un filósofo que presta atención a los seres vivos (también era biólogo): plantando un pino
Una semilla de un pino lo es en acto, su existencia en este momento del tiempo es esa. Pero la Entelequia le empuja a convertirse en otra cosa, en su verdadero ser: un pino completamente formando y fértil, que dará otras semillas de pino (cerrando el ciclo, algo muy griego). Esa es su existencia en potencia, su verdadera Forma o Idea, e irá cambiando su Materia y Sustancia gracias a la Entelequia hasta alcanzar dicho estado. Cuando la semilla de pino se vuelve un pino y comienza a esparcir semillas con sus piñas, cuando su máximo potencial se vuelve acto, se dice que ha alcanzado la Energeia, la plenitud de esa forma, el equilibrio entre Acto y Potencia, Entelequia y Energeia.
Sin embargo, como Aristóteles no cree que las Formas existan en otro mundo, no cree en lo eterno e inmortal. Así que tarde o temprano, el pino, como ser vivo, muere; y es la muerte la que acaba con su Forma o Idea, convirtiéndose en otra cosa. Primero se seca, luego cae en una tormenta, se pudre y termina siendo humus para otras plantas. La sustancia original del ente pino, al perder su Forma, se convierte en otra cosa pues cambia la Forma anterior (pino) por la Forma de humus, empezando así otro ciclo de transformación.
Para Aristóteles, nuestra esencia o ánima es lo que nos impulsa a estar vivos, pero cuando esta desaparece por la muerte, no se va a otro mundo perfecto como defendía Platón. Sencillamente abandona la Materia o cuerpo donde estaba, y otra Forma ocupa su sitio para transformarla en algo nuevo.
¿Lo habéis notado? Nuestro lenguaje está lleno de conceptos aristotélicos: actual, potencial, energía, animación. Hasta los locutores deportivos, esos ignorantes disfrazados de periodistas, hacen referencia a las ideas de este filósofo muerto hace 2400 años cuando dicen “este jugador tiene potencial”.
Hasta ahora hemos visto que Aristóteles se tira más del lado de Heráclito que de Parménides para explicar qué es lo real, pero lo encierra todo en ciclos. Y es que la mentalidad antigua griega va siempre caminando en ciclos, no hay un principio o fin, sino una vuelta a los orígenes constante, por lo que el cambio realmente no lleva a ninguna parte, y sin embargo todo es siempre distinto.
Esto luego veremos que también se da en el mundo artístico: los ciclos, y el eterno retorno a los cánones griegos.
Epistemología
Vale, hay Materia e Ideas, pero no separadas sino juntas para dar lugar a algo. ¿Pero cómo podemos saber con seguridad qué son las cosas? Por una vía doble: la experiencia y el intelecto. Como explicaba en la entrada anterior, Aristóteles es un hombre de acción. En vez de matemático criado en una escuela Pitagórica (como Platón) no se la pasaba formulando teoremas y formas geométricas en su cabeza, sino que se ponía sus mejores botas y salía al campo a cazar mariposas… o delfines. Porque fue así, observando y diseccionando delfines, como Aristóteles se dio cuenta de que no eran realmente peces, sino mamíferos con pulmones y cuyas hembras alimentaban a las crías con leche como nosotros, los perros, gatos o caballos y cabras.
Para Aristóteles, la información que proporciona nuestros sentidos sobre la sustancia la trata el Agente o Intelecto Activo. Esta parte del intelecto la tienen todos los animales (no las plantas) y les ayuda a relacionarse con el mundo. Es el que convierte el conocimiento en potencia en conocimiento en acto, de ahí su nombre.
Pero por otra parte, está el Agente o Intelecto Pasivo, característico de los seres humanos, que es capaz de ver más allá de las experiencias que proporciona la sustancia para encontrar la verdadera Forma o Idea que late dentro de esa Materia o Sustancia.
Esta teoría sobre el conocimiento se conoce como Hilemorfismo, y se mantuvo vigente en el Mundo Antiguo hasta la revolución científica del Siglo XVII. ¡Casi nada!
Siguiendo el ejemplo del pino, Aristóteles cree necesario que para saber qué es un pino, primero tenemos que ver muchos (entre otros árboles), tocar su corteza, olerlos, recoger sus piñas, saborearlo… eso no, ¡aunque bueno, quien sabe! Tu Intelecto Agente reporta a tu Intelecto Paciente las características que perciben tus sentidos, y de esa manera puedes categorizar los pinos al separarlo de otros árboles por su aspecto, altura, tipos de hojas, rugosidad del tronco, etc. También al ver cómo son sus semillas y tras ver como brotan y crecen hasta crear un pino adulto, tu Intelecto Paciente ve el potencial o ser-en-potencia de una semilla de pino.
Con una semilla de pino en la mano, tu Intelecto Agente te dice que es precisamente eso en acto (una semilla de árbol), pero luego el Intelecto Paciente te dice gracias a experiencias anteriores que la Forma latente dentro de esa semilla es la de un pino adulto, que la Entelequia irá convirtiendo su Sustancia poco a poco hasta alcanzar su Energeia: la Forma de un pino adulto.
Algo similar sucede con los delfines. A primera vista, el Intelecto Agente te dice que vive en el mar, tiene aletas y forma de pez, así que el Intelecto Paciente te dice que es un pez. Pero cuando lo examinas a fondo como hizo el estagirita, verás que tiene pulmones y no branquias, e incluso senos para amamantar, y entonces tu Intelecto Paciente crea un nuevo conocimiento que pone el delfín en la misma categoría de animales que el caballo, la vaca, la cabra, el perro o el gato. Incluso el humano. Es un mamífero.
Con pura observación y lógica es como este hombre de campo creó la taxonomía en biología: experimentando (algo que rechazaba Platón) pero también pensando para entender que son las cosas más allá de sus apariencias. Hasta 500 seres vivientes llegó a catalogar Aristóteles antes de enseñar a Alejandro Magno.
Antropología y ética
Aristóteles considera que los seres vivos tienen un cuerpo hecho de Sustancia, pero también una Forma que la llama Ánima, que significa movimiento en griego, y es su principio vita. Un ser vivo se mueve, crece, se desarrolla, se reproduce, etc. por su ánima o principio vital. Cuando muere, dicha ánima ya no está, y el cuerpo o sustancia se convierte en otra cosa.
Es así como divide los seres vivos en tres tipos, acorde a su ánima:
- ánima vegetativa, que sólo busca nutrirse y reproducirse
- ánima sensitiva, que además de lo anterior, logra percibir, moverse y desear
- ánima racional, la de los humanos, que además de lo anterior tiene la capacidad de razonamiento gracias al Agente Pasivo
Para este filósofo, la vida virtuosa de un hombre se basa en la vida contemplativa, analizar lo que le rodea, razonar sus decisiones para ser feliz. Escribió su filosofía ética en función de ésto, y como gran pragmático que era, deja claro que es el hábito de obrar bien lo que nos vuelve seres éticos, y no el conocer lo que está bien como decía Platón. Y siempre esto dependerá del contexto, no hay universales absolutos a la hora de tomar decisiones. Diez libros o volúmenes de Ética para Nicómaco dan fe de ello.
Crítica moderna a Aristóteles
Filósofos y pensadores posteriores echaron pestes de Aristóteles y Platón porque su manera de razonar se basaba únicamente en la lógica y eran proto-científicos. Y es indudable que eran más filósofos que científicos, pues filosofía y ciencia eran una sola en sus inicios en el mundo antiguo griego.
Con toda su grandeza, nos dejaron por ello también grandes errores. Aristóteles pensaba que un objeto más pesado cae antes que otro más liviano, o fijó en piedra el modelo geocéntrico del sistema solar. Pero sin duda, lo que nos dejaron ambos (y más el estagirita) es parte del conocimiento común de personas normales hoy en día.
Vale pues, después de todo este rollazo… ¿dónde nos lleva Aristóteles en la filosofía estética?
La estética según Aristóteles
Ha quedado claro que Aristóteles, si bien es un filósofo idealista como Platón, lo es subjetivamente y apegado al realismo. Existen las Formas e Ideas y son las que debemos conocer para saber la verdad, pero esto se logra primero experimentado y después razonando.
Todo el rato, en todos los apartados vistos, vemos que es alguien muy pragmático y consecuencialista: hay razón para todo, hay un motivo para cada acción y una reacción en consecuencia. Y eso que no puse nada de Lógica, Política y Metafísica, donde también se ve muy claro toda esta manera de pensar del estagirita.
Entonces, qué opinaba del arte Aristóteles: que es una buena manera de alcanzar las categorías de las cosas, pues nos proporciona experiencia si la obra es buena. Pero para ello, debe imitar la naturaleza, recordemos que la mentalidad griega tiene grabado a fuego que arte es mimesis.
Aristóteles no ve el arte como Platón, una copia de una copia, así que si imita el mundo natural con la simetría, el tamaño correcto, el orden debido y la delimitación exacta, entonces nos permite llevar esa vida contemplativa que interpreta como la clave de la felicidad y virtudes humanas.
Platón y Aristóteles son Eudemonistas, esto quiere decir que ellos creen firmemente que la vida está para disfrutarla como sólo un ser humano pleno haría: observando y deleitándose con la belleza de las cosas y potenciando al máximo el intelecto. Platón lo explicaba con el Impulso Erótico y la abstracción filosófica, y Aristóteles con el Agente Pasivo y Agente Activo, además de el Justo Medio de su ética.
Y aquí, para el estagirita, el arte tiene un papel fundamental: al imitar la naturaleza primera (y segunda, tercera, etc.) de las cosas, es como nos permite acceder al conocimiento, y a veces de manera ventajosa, o sin riesgos.
Si Platón opinaba que los poetas debían ser desterrados de su polis griega perfecta en La República (se la tenía jurada desde que Melito acusara a Sócrates), Aristóteles en Poética deja claro que la poesía ayuda a entender mejor los universales, o que el dibujo tiene una capacidad educativa enorme (biólogo spoted), o que la pintura muestra las costumbres y moralidad de cada época.
La función de un buen artista es descubrirnos a los demás, con su obra, el elemento universal de la realidad.
Pero para este filósofo el mayor arte de todos es la Tragedia, es decir, el arte teatral. Pero antes que nada, ¿cual es el origen de la tragedia griega (y por lo tanto de todo el teatro de occidente):
Durante la época de Aristóteles ya existían grandes tragedias griegas. En una época sin Netflix ni pelis de Avengers (ni porno ni MediaVida para debatir y hacer el tonto), el mayor entretenimiento era asistir a una obra de teatro. Pero hay que entender que el teatro en la época griega no era un producto destinado a una élite y para unos pocos, era algo comunitario que exigía la presencia de todos los ciudadanos (y buena parte de sus esclavos), era un momento donde se olvidaban de todos sus problemas para centrarse en la trama de la obra.
Es ahí, cuando Aristóteles se da cuenta que las buenas tragedias griegas aportan conocimiento a su público. Con una buena actuación y un guión competente, los espectadores sienten lo que transmiten los histriones, y de esa manera purgan sus emociones y aprenden ideas, conceptos o lecciones en un proceso que el filósofo llamó CATARSIS.
Y ciertamente, esto es aplicable hasta nuestros días. Vemos películas de héroes que realizan lo que deben sin importar las consecuencias (esto es muy griego, de hecho),
o cuentos infantiles que nos dejan una moraleja importante a nuestros pequeños.
No iba desencaminado Aristóteles al afirmar que el teatro (o cine moderno) a través de sus historias nos permite identificarnos con los personajes y aprender a través de estos como comportarnos o qué esperar del futuro.
Así que sí, para Aristóteles, las emociones cuando son bien guiadas por la buena estética, nos permiten experimentar como testigos la realidad de las cosas, o dar lecciones de como ser y actuar.
Los ciclos artísticos
Vimos antes como según Aristóteles y los antiguos griegos, todo se explica cíclicamente. Y si estamos un poco atentos, la estética no es una excepción. Suele darse un proceso similar a este:
- surge un estilo artístico nuevo, algo tosco y rudimentario en los inicios, con rechazo por parte de críticos y/o público, pero que con el tiempo gana aceptación
- con el transcurso de años (o siglos), dicho estilo alcanza un cénit, un momento en que sus mejores autores alcanzan reconocimiento y fama definitiva. Se crean las obras maestras que lo representan en su plenitud máxima
- empieza un proceso de recargamiento, exageración y decadencia. Fruto de un cambio de pensamiento y sentir en su cultura, el estilo artístico pierde algunos de sus elementos y características básicas de sus inicios, cuesta incluso a llegar a reconocerlo como el mismo tipo de arte al compararlo con sus inicios. Poco a poco se agota y causa rechazo o cansancio a artistas, público general y entendido
Tenemos de ejemplo el arte en Europa, que pasó por fases grecorromanas más austeras o/y clásicas (arte griego, arte romano, arte románico, arte renacentista, arte neoclásico) alternadas con otras más recargadas, exageradas o incuso decadentes (arte godo, arte gótico, arte barroco, arte romántico).
A veces, entre una fase y otra, hay otras intermedias, como el Manierismo que esta entre el clásico y sobrio Renacimiento y el recargado y decadente Barroco. También dentro de cada uno de estos artes listados hay fases internas de Primigenio-(Transición)-Clásico-(Transición)-Recargado/Decadente. Y la griega no era una excepción a este ciclo, paradojas las justas.
Vamos a verlo a través de su escultura.
Periodo Arcaico
Click para verLa escultura arcaica griega es una copia básica de la egipcia. Si fuéramos el Almirante Thrawn, entenderíamos a los antiguos egipcios para derrotarlos a través de su arte, y notaríamos su obsesión por la inmortalidad y que las cosas fuesen eternas. Las pirámides son un gran ejemplo de esto, pero viendo sus esculturas, la rigidez y monolitismo de dichas estatuas no obedece a la incapacidad de hacer obras dotadas de mayor movimiento, sino el crear algo que durase más tiempo intacto.
Cuando a una estatua le empiezas a separar las extremidades, es muy probable que con el tiempo se pierdan dichas partes por la erosión, sobre todo si están expuestas al aire libre. Los egipcios querían sus obras lo más intactas posibles por el mayor tiempo deseable.
Los primeros escultores griegos heredaron este estilo de los egipcios, a quienes admiraban por la belleza de su arte, más refinado de lo que parece a primera vista. Y crearon así los kuroi, atletas griegos desnudos con el mismo rostro de Chuck Norris de los egipcios, además de su frontalidad y rigidez.
Los primeros eran de madera (se han destruido D: ) y luego vinieron los de mármol. Son obras pensadas para ser vistas de frente, los laterales pierden importancia en su contemplación. Es un tributo a la belleza masculina, su fuerza y su poderío. Porque no olvidemos que toda la Antigua Grecia destaca por el homoerotismo. Era una cultura totalmente antropocéntrica, es decir, centrada en la figura humana; pero para ser más exactos en la masculina.
Para ser exactos, la cultura de la Antigua Grecia es antropocéntrica, homoerótica y misógina. Las mujeres griegas hacían su vida prácticamente encerradas en una sala de la casa conocida como gineceo. Los antiguos griegos amaban y exaltaban tanto la figura humana varonil, que era muy aceptado el desnudo masculino público en determinadas situaciones, como competiciones deportivas. Las mujeres sin embargo… como que les daban asquito xD Sí, un poco bastante de misoginia gay en aquellos tiempos, generalizando y simplificando mucho las cosas.
Sin embargo, no se olvidan de la figura femenina en sus esculturas, pues eran representadas en otro tipo de estatuas, en el periodo arcaico las llamadas korai, que normalmente eran diosas y personajes femeninos mitológicos. Con los equivalentes varones igual, pero sí que mostraban a atletas completamente humanos como muestra de admiración (muy gay todo esto xD ) a ellos. Con las mujeres esto era impensable: ¡al gineceo, cuidar la casa y la prole y ya!
Como podemos ver a un poco que busquemos, nunca se muestran desnudas (a lo sumo con las largas puestas, pero esto más que por sensualidad es por realismo, pues el sujetador no era tan común para las antiguas griegas). También era habitual pintar estas estatuas ubicadas en templos dedicados a estas diosas o ninfas.
La misma korai (diosa Artemisa) de antes, reconstruida como se vería allá por el VII a.C. en su templo.
¿Un poco pasada de colores, no? xD
Poco a poco, el estilo arcaico fue evolucionando al clásico, y pasa por un periodo de transición conocido como estilo Severo. Algunos autores lo llaman Estilo Arcaico Final, y otros Preclásico o Periodo Clásico Inicial. Como vemos, no está claro donde ponerlo, porque aunque mantiene la frontalidad en la mayoría de estatuas, estas cada vez más van separando brazos y partes del cuerpo.
Aúriga de Delfos (original griego de bronce). Aquí vemos como se abandona la sonrisa de pasado en MDMA y los brazos se despegan un poco del cuerpo.
Guerreros de Riace (original griego de bronce). Frontalidad y postura de descanso, como apoyándose sobre una lanza. Más adelante, en otro periodo de transición entre el Clásico y el Helenístico, el Manierista, veremos a Praxíteles que utilizaba magistralmente esta técnica conocida como curva praxiteliana.
Apolo Olimpia (copia romana). Frontalidad aunque más libertad en los brazos.
Los tiranicidas de Antenor (copia romana), que resultaron ser unos héroes atenienses al matar al tirano Hiparco, y además amantes entre ellos. Ya no hay tanta frontalidad y sí cierto movimiento, como señalando la victoria.
Poseidón (o Zeus, original griego de bronce). Ya nada de frontalidad, más movimiento y viveza en la estatua, sin embargo sigue sin ser clásica por sostenerse claramente de pie… y por la datación, porque en mi opinión si le dicen a un experto que esta estatua es del 400 en vez del 460 a.C. se la cuela como clásica ya xD
Algo parecido podemos decir del Discóbolo de Mirón, ya visto con Platón. Es del periodo severo o preclásico, pero prácticamente la podemos considerar clásica al romper la estricta frontalidad y dar un gran movimiento a la estatua.
Como vemos, sigue el interés por el desnudo masculino y se perfecciona su anatomía, el tema preferido son los atletas y dioses, pero evoluciona el gesto de la cara (mínimamente), se va quitando la frontalidad y se da un mayor movimiento a las obras.
¿Y las mujeres?
Igual prácticamente: sólo figuras femeninas mitológicas como diosas, nunca desnudas y a lo sumo unas transparencias de Afrodita en su nacimiento en un friso o medio-relieve
Trono Ludovisi
Periodo Clásico
Click para verDurante esta fase se va refinando poco poco el arte escultórico griego. Además del mármol, se emplea el bronce. Se pulen más las estatuas evitando dejarlas con un tacto rugoso (los kuroi eran casi estropajo metálico), se pueden ver desde distintos ángulos y se busca transmitir un mayor movimiento.
NotaEsta también es una copia romana, la original era de bronce y fue casi seguramente destruida D:
El Doríforo de Policleto es una clara transición entre el estilo severo-arcaico y las esculturas clásicas. Mantiene cierta frontalidad, el tallado aún es tosco, pero se aprecia mayor movimiento y el gesto no es una sonrisa extraña de yonki pasado de MDMA. Fue una obra muy criticada en su tiempo, pero a su vez de gran éxito popular por la gran cantidad de copias que se realizaron. Los detractores comentaban que no mostraba la grandeza de un héroe como Aquiles, a quien parece estar dedicada; pero los que la apreciaban destacaban su belleza y sobretodo sus proporciones.
Polícleto fue el primer escultor que utilizaba proporciones en sus obras, por ejemplo la cabeza era la séptima parte del cuerpo, los pies el doble de grandes que las manos, etc. De esta manera, la obra une dos de las cosas más importantes de la época: el antropocentrismo (homoerótico) y el explicar todo a través de números, como hacía la filosofía de Pitágoras (de gran éxito en su época, poco anterior a Sócrates y Platón).
Pitágoras fue el primer gran matemático puro occidental, creo su escuela con éxito, y también era un filósofo del grupo de los Cosmólogos Presócráticos. Para él, el arke eran los números: la realidad se podía explicar a través de ello, como por ejemplo el número aúreo del que era conocedor desde los tiempo de Euclides, y que al parecer está presente en la naturaleza si atendemos la secuencia Fibonacci y la espiral dorada, presente en algunas estructuras naturales como las galaxias o algunos moluscos marinos.
Las proporciones de las esculturas griegas en el periodo clásico siguen un canon iniciado y descrito por Polícleto, muy pitagórico a su vez éste. También las obras arquitectónicas guardan una relación de proporciones acorde a la naturaleza, como el Partenón de Atenas.
¿Y qué pasa con las mujeres?
Pues sólo se siguen representando a diosas, porque no había mujeres atletas ni destacadas en una sociedad misógina como la griega. Sin embargo, poco a poco van desnudándose como sus equivalentes masculinos, en un striptease escultórico de siglos.
Cariátides del Erecteion, en la acrópolis griega. Son el fuste de columnas, su equivalente masculino son los Atlantes. Como se aprecia, llevan las túnicas humedecidas para así dar excusa a mostrar más detalladamente sus cuerpos. Son de las primeras obras femeninas dotadas de cierta sensualidad.
Diosa Nike de Peonio, de la escuela de Fidias, que celebraba una victoria ateniense sobre los espartanos. Muestra un seno descubierto, algo habitual en la Antigua Grecia.
Igual que las masculinas, las estatuas femeninas poco a poco cobran más importancia, y ganan también en movimiento, emoción y sensualidad.
Sin embargo el mayor autor clásico es Fidias, quien compuso obras gigantes como la Atenea de la Acrópololis ateniense, hecha en buena parte de márfil y oro y de la que (por supuesto) no ha quedado nada. Esta es una de las copias más fieles a la original.
o la estatua gigante del Dios Zeus, también destruida. Esta es una copia similar, pero en mármol, no oro y márfil.
Periodo Clásico Tardío o Manierista
Click para verEste es el periodo contemporáneo a Aristóteles y en el que quiero hacer más hincapié, pues muestra según algunos autores lo mejor del clasicismo y para otros ya es otro estilo más refinado y elitista, dotado de significado mayor que la pura belleza.
Este estilo es de transición entre el Clásico y el Helenístico.
Praxíteles es el autor más destacado de esta época, y sus estatuas son conocidas por lo pulido y suavidad de éstas, ademas de una curva muy típica, que otorga movimiento y sensualidad a las mismas.
Apolo sauróctono. Aquí aparece un dios Apolo aún adolescente, entretenido en algo tan vulgar e incorrecto en el tema como matar un lagarto. Algunos ven aquí el simbolismo de que el dios de la salud mata al representante de las enfermedades, pero ciertamente no es un acto aparentemente heroico. La curva es muy destacada, añadiendo sensualidad, picardía y movimiento. Incluso el gesto de la cara rompe la típica serenidad de hasta entonces con uno nuevo de interés en matar el lagarto.
Es aquí donde se aprecie el cambio del clasicismo medio al tardío o manierismo. Ya es posible representar dioses de una manera especial y distinta, nunca vista antes.
Hermes con el niño Dionisio, otro buen ejemplo de la curva praxiteliana y mostrar a un dios en una postura atípica (cuidando a otro dios cuando es niño). Aunque esta es una copia romana, es fiel a la original, también de mármol, y muestra un pulido excepcional que muestra la “piel” del dios brillante y delicada.
La Afrodita de Cnido es una estatua muy especial de este periodo de transiciones y cambios. Es el primer desnudo femenino total y definitivo, pero ahora la veremos al terminar más a fondo como ejemplo de obra maestra de arte y porqué. Solo adelantar que supuso un escándalo en su época, pero ha servido de ejemplo para posteriores desnudos femeninos en escultura y pintura.
Periodo Helenístico o Alejandrino
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Tras los cambios introducidos por Praxíteles en el Clasicismo tardío o manierismo, se dan una serie de cambios en la Hélade que cambian por siempre la manera de ver al mundo. A la muerte de Alejandro Magno, y sin su principal potencia rival amenazando (el imperio aqueménida), la Grecia Antigua se surge en guerras entre Diádocos o generales que sirvieron al Magno.
El arte griego se transforma casi por completo. A veces muy sutilmente, como con las esculturas praxitelianas, y otras de una manera descarada y nunca antes vista, pero igualmente increíble y bella.
El apoxiomenos de Lísipo (esta es una copia romana, para variar D: ) nos muestra a un atleta, rostro sereno, musculatura perfecta y proporciones canónicas como el Dorífono de Polícleto… pero ha desaparecido por siempre la frontalidad. Se puede mirar desde cualquier ángulo (aunque la espalda tiene menor importancia) y nos muestra a un atleta en el momento en que se limpia el sudor y arena con aceite y un rastrillo.
No nos muestra a un atleta victorioso, magnífico y posando para mostrarse así, sino a otro que tal vez incluso no ha ganado, pero igualmente se ve bello en algo tan común y mundano como limpiarse tras el torneo (seguramente una lucha).
La archiconocida Venus de Milo, claramente influenciada por la Afrodita de Cnido. Comienza el desnudo femenino a ser habitual y sin faltarle sensualidad.
Luchadores se rompe por completo la frontalidad de la escultura, ya no hay verticalidad y se intuyen gestos de dolor en el que está siendo derrotado. Musculatura tensa, casi sobrehumana por el esfuerzo
Bárbaro derrotado. Los griegos, ya como imperio, comenzaron a tener nuevos enemigos externos, y aparecen estatuas donde reflejan estas nuevas tribus. Aquí aparece un soldado bárbaro, probablemente bárbaro, derrotado y herido de muerte. Se aprecia la herida sangrante en el costado y el gesto de aceptación de la derrota y muerte, como esperando el golpe final. El dramatismo y desesperación, así como otras emociones, va a ser algo cada vez más frecuente en el periodo helenístico, que abandona por completo la serenidad para mantener las facciones bellas del periodo clásico.
Hermafrodita durmiente Siempre he opinado que los griegos ya lo inventaron todo. ¿Pensábais que el gusto por las mujeres completas es exclusivo de FEDA? ¡No! Los griegos helenísticos ya mostraban seres mitologicos femeninos pero con pene. Hermafrodito era hijo de Hermes y Afrodita, y como se aprecia es una mujer completa.
Esta estatua es una copia del bronce original de Policles, y el colchón fue pulido y retocado por Bernini (el del David arrojando la piedra a Goliath que vimos antes).
Esta estatua exige verla desde distintos ángulos, como muchas de este periodo que ya no evita la frontalidad, sino que exige al espectador dar vueltas y vueltas a su alrededor para apreciar los detalles y el movimiento.
En otra entrega veremos uno de los mejores ejemplos de este tipo de observación tridimensional, nuevamente con Bernini (Apolo y Dafne)
El toro farnese, otro ejemplo de multipunto de vista, movimiento desmesurado, y técnica escultórica refinadísima
Grupo de Lacoonte, donde se meustra al sacerdote troyano a punto de morir estrangulado junto a sus hijos a modo de castigo divino. Aquí se ve una vez más un dramatismo exacerbado, movimiento y múltiples puntos de vista. La musculatura del padre es herćulea, descomunal.
Galo suicida Otro ejemplo de movimiento y dramatismo extremo. Pertenece al mismo grupo escultórico del Galo derrotado. Aquí el guerrero, para evitar ser capturado como esclavo, mata a su mujer y procede a suicidarse clavándose la espada por la clavícula hasta el corazón. Mirad la sangre :S
La Afrodita de Cnido, escultura de Práxiteles (Clásico tardío o Manierista)
Hasta ahora hemos podido apreciar obras artísticas de gran calidad, todas ellas claro reflejo de la manera de pensar de su época y los cambios que vivió el mundo griego. Esto prueba el punto de que el arte y la estética nos permiten entender mejor la idiosincracia de cada cultura.
Sin embargo, hay obras que trascienden porque van más allá, y en vez de limitarse a testificar esa manera de ver e interpretar el mundo, lo cambian y marcan un punto de inflexión, convirtiéndose en una obra maestra universal.
Como comentaba antes, fue el primer desnudo femenino en la escultura griega, y causó estupor entre los griegos no por pudor, sino por mostrar a una diosa de una manera totalmente terrenal y cercana, ademas de sensual e insinuante. La diosa del amor y erotismo, se muestra por primera vez naturalmente erótica.
Normalmente las estatuas destinadas a dioses y héroes eran de un tamaño grande (cerca de 2 metros), las de atletas o kuroi de tamaño natural (1.50-1.70), y otros personajes menores, o villanos y enemigos,de menos de metro y medio.
La Afrodita aquí mostrada está a tamaño natural, y no parece mostrarse sorprendida (ni desagradada) ante el espectador, que la atrapa justo en el momento que se desnuda para darse un baño. Apenas alcanza a taparse el pubis, y muestra sin recato alguno los senos con un postura corporal entre receptiva y pícara.
La clave de esta obra, siguiendo el concepto de arte como mimesis, es imitar la realidad, y en concreto el momento. El espectador no se sintió en aquella época ante una estatua común de Afrodita, sino ante la propia Afrodita que lo deslumbra con su belleza y sensualidad.
Para realizar la obra, Praxíteles utilizó de modelo a Friné, una hetera, que eran lo más parecido a una geisha en la Antigua Grecia. Al contrario que las demás mujeres, la heteras contaban con una educación de calidad y sus opiniones en las asambleas eran tomadas en cuenta. No eran unas prostitutas de lujo exactamente, aunque daban por un precio servicios sexuales, entre otros.
Friné, que al parecer estuvo envuelta en algún que otro escándalo, ya sabía explotar su sensualidad como una aparecida Afrodita ante uno de sus amantes inesperados. Puede que influyera voluntariamente o no en esta obra aparte de como modelo, en su concepto de poner todo patas arriba.
Porque esa es una de las finalidades del ARTE escrito así, con mayúsculas: sacudir nuestros cimientos, creencias y sentimientos, dejar todo en entredicho. Y sin lugar a dudas, esta obra marca un ante y un después.
¿Que dirían Platón y Aristóteles de ella?
Para Platón sería un ejemplo de como lo bello nos permite alcanzar el mundo ideal a través del concepto de belleza. El Impulso Erótico no hace fijarnos en un cuerpo bello, pero luego nuestra parte racional nos demuestra que es lo verdaderamente bello, que no está aquí sino conceptuado en el Mundo Formal.
Aristóteles en cambio empezaría ha hablarnos del Agente Activo recopilando por nuestros ojos la estatua, y luego el Agente Pasivo nos invitaría a reflexionar sobre la esencia de la belleza, la atracción sensual y erótica en la obra que está unida a la materia de que está hecha.
En el fondo, no eran tan distintos dos sabios viejos verdes
Recomiendo leer este artículo sobre la Afrodita de Cnido
https://elpais.com/elpais/2019/01/31/ideas/1548952908_467330.html
¡Dentro de unas dos semanas, otra entrega. Nos moveremos a épocas más modernas!