Xing, chino de 41 años, se encontraba en la plaza LanTian de Hong Kong disfrutando del lugar, hasta que en un momento se exitó y decidió satisfacer sus impulsos introduciendo su pene en uno de los agujeros de la banca en la que se sentaba.
Como era de esperar...las cosas salieron mal...
Tras introducir su pene, este, naturalmente, se hinchó y produjo que no pudiese ser retirado del agujero. Ante ello, el asustado y "caliente" Xing decidió llamar a la policía para que le ayudaran.
Tanto médicos como policía trataron de ayudarle sin resultados (incluso intentaron eliminar algo de sangre del miembro para ver si así salía), razón por la cual se oprtó por cortar un pedazo de dicha banca y tasladarlo con ella al Hospital.
Según los expertos, de haber permanecido una hora más en idénticas condiciones, habría sido muy probable que Xing hubiese visto su pene amputado.