Una jueza ordena secuestrar el libro sobre narcotráfico de Nacho Carretero tras la denuncia de un exalcalde gallego. La editorial acababa de distribuir 10.000 ejemplares más hace pocos días
José Alfredo Bea Gondar ejerció de alcalde de O Grove en la dictadura tras destronar a su primo, que se había ido de crucero al Caribe dejándolo al mando: a su vuelta se desató la guerra. Volvió en 1983 con una lista de independientes, pero entonces su mejor amigo se cambió al CDS dejándolo en minoría. Lo que ocurrió después es que se negó a convocar un pleno durante dos años para evitar la moción de censura. Se atrincheró en el Ayuntamiento con decenas de votantes que llegaron a ocupar día y noche el salón de plenos para que allí no se debatiese nada, hasta que el Ministerio de Interior envió fuerzas especiales de todas partes de España para ocupar azoteas, tejados y terrazas de O Grove con el objetivo de evitar enfrentamientos entre partidarios y detractores del alcalde, y garantizar la celebración del pleno que lo echó del Ayuntamiento.
En 1991, de vuelta a una candidatura independiente, fue el más votado en las elecciones municipales. Tres días antes de que se constituyese la nueva Corporación, agentes policiales entraron en su casa a las once de la mañana y lo detuvieron. Fue una operación ordenada por el juez Baltasar Garzón: se había arrestado en Madrid a un colombiano con 30 kilos de cocaína en un coche que había sido alquilado por Bea Gondar en Pontevedra. 72 horas más tarde, los partidos políticos de O Grove no se pusieron de acuerdo para votar por mayoría absoluta a un candidato, así que José Alfredo Bea Gondar, que no recibió ningún voto en la sesión, fue proclamado alcalde. Recibió la insólita noticia en la cárcel de Alcalá Meco, acusado de un delito de narcotráfico. Su mandato duró dos días, hasta que por incomparecencia la Corporación acordó destituirlo.
Bea Gondar pertenece a un tiempo en las Rías Baixas gallegas en el que las fronteras entre el narco, la justicia y el poder estaban tan difuminadas que un militante de peso de Alianza Popular y presidente de la Cámara de Comercio de Vilagarcía, Pablo Vioque, terminó dirigiendo el desembarco de dos toneladas de cocaína y ordenando matar al fiscal jefe antidroga de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza. Esa gigantesca red sembró Galicia de muertos y fue recogida, en un trabajo exhaustivo publicado en 2015, en el libro Fariña del reportero de EL PAÍS, Nacho Carretero. Once años después de aquella detención, el juez Garzón consideró que los 30 kilos de cocaína del coche de aquel colombiano eran el hilo del que había que tirar hasta llegar a un alijo de 2.000 kilos en el que estaban implicados el cartel de Cali, patrones de barco, un ex guardia civil socio de Sito Miñanco y el propio José Alfredo Bea Gondar.
Ése fue el relato de hechos de Garzón que publica Carretero en Fariña, donde Bea es citado dos veces para decir que fue procesado por aquello. El exalcalde de O Grove fue finalmente condenado por la Audiencia Nacional por un delito de narcotráfico; la sentencia, sin embargo, fue revocada por el Tribunal Supremo al invalidarse el testimonio de un arrepentido. Ese defecto de forma llevó a Bea Gondar y cuatro condenados más a ser absueltos. Posteriormente Bea, un habitual de las crónicas del narco que también aparece en las memorias de Baltasar Garzón, fue condenado por un delito de blanqueo de capitales provenientes del narcotráfico.
En enero de 2016, José Alfredo Bea demandó a Carretero y a su editorial, Libros del KO, por un supuesto delito de “injurias y calumnias” al relatar su participación en aquella operación. Reclama 500.000 euros (“medio millón o nada”, anunció a la editorial cuando ésta se avino a dialogar), rectificación pública, difundir la falsedad de las afirmaciones y la desaparición de su nombre del libro. También medidas cautelares que la jueza ahora ha estimado parcialmente, como el secuestro de Fariña y la prohibición de imprimir más ejemplares. Para que el secuestro se aplique, Bea Gondar deberá depositar 10.000 euros.
De este modo, tres años después de la publicación del libro, ya convertido en superventas y con una serie producida por Bambú que emitirá Antena 3, Fariña deberá desaparecer de las librerías en las próximas fechas si Bea deposita el dinero y la editorial no recurre. El juicio está previsto para los meses de abril-mayo. Libros del KO acababa de imprimir y distribuir hace pocos días la décima edición de Fariña, 10.000 ejemplares más. El autor se ha limitado a decir que está “sorprendido” por la decisión y lamenta el “destrozo” que puede suponer a la editorial si la tirada es secuestrada.
https://elpais.com/cultura/2018/02/20/actualidad/1519153846_719029.html
Me a parecido muy interesante la historia detrás de este libro y la desconocía por completo. Me ha dado muchas ganas de leer sobre el tema.