Personalmente, entiendo el punto de vista de #1
Me explico. Coincido con el morbo que te puede aportar introducir terceras personas en la relación si todo se trata de sólo sexo, y si tienes la suficiente fuerza como para separar lo sexual de lo sentimental. Yo tengo un morbo parecido, me produciría excitación ver a mi pareja con otro hombre, sí, claro, por que no? No deja de ser un juego más, como quién se compra un consolador. Es un juguete, y una diversión más. Hasta ahí yo comprendo y entiendo esa excitación. Lo que no llegaría a poder tener es una relación basada en ésto.
Me explico de nuevo. Hay parejas que hacen tríos, hay parejas que se compran juguetes sexuales, y hay parejas que tienen una vida sexual muy básica. Todo va en cuestión de gustos. Yo, como práctica sexual esporádica, y por probar, lo haría, tanto hacerlo ella con un chico, o yo con una chica, de carácter estrictamente sexual. Ahora, como método de vida y de relación, me costaría y no sería realmente capaz de hacerlo. No sé hasta qué límites podría aguantar, ya que como digo sólo se trata de sexo y bajo unas reglas que se tendrían que poner antes, es decir, que no conozca a la persona con anterioridad, que no se establezca ningún contacto físico o verbal a posteriori, etc.
Como digo, como práctica sexual, como quien se compra un consolador para jugar de vez en cuando, lo vería bien. Como relación en sí, inviable.
Creo que algo base en ésto es la relación y el entendimiento de que estás utilizando a esa persona para el placer de ambos, de igual que formas que cuando haces un trío. No pretendes introducirlo ni en tu vida, ni ella en la suya, si no usarlo como juguete, nada más.