En realidad la era del Kali Yuga está llegando a su fin, y pronto sobrevendrá un pralaya o ciclo de destrucción durante el cual el Demiurgo destruirá el universo físico.Los demonios de Chang Shambala, los Siddhas Traidores de la jerarquía Blanca, saben esto perfectamente, y por eso están manipulando el Tiempo, contrayéndolo para que no siga avanzando hasta su fin, y eso provocará al final una implosión que acabará con el propio Sanat Kumara, con su Jerarquía de Siddhas Traidores y con el propio Demiurgo, y permitirá la entrada a este Universo de Espíritus Hiperbóreos, comandados por el Emperador de Jade y ayudados por los Siddhas leales que ya se encuentran aquí bajo el liderazgo de Kristos Lucifer.Ellos librarán la guerra final contra el Demiurgo y sus huestes, y tras su aniquilación la raza luminosa, los pneumáticos, podrán volver junto a Bythos, en la Región de los aeones luminosos conocida como Pleroma o Wuji.
La Hermandad Blanca de Chang Shambhala, conociendo esto, está planeando su estrategia final: darán a conocer públicamente su existencia e intentarán acelerar de esa manera la fusión de la Humanidad psíquica con el Arquetipo Manú, cuyo ejemplo más actual en la Tierra son la raza hebrea, los brahmines y los druidas.Tendrán éxito entre aquellos que siguen el camino del Corazon o Anahata Chakra, los que aman el Universo Creado y al Creador, consideran el Espíritu obra de sus manos y desean arrodillarlo ante él, y se doblegarán fácilmente ante las mentiras de las Potencias Oscuras de la Materia.Pero la raza de los vyrias resistirá, y por su negativa a someterse estallará la lucha final entre las huestes del Incognoscible y las del Satán Creador, Yahweh Satanás, Ain sof, el Uno, Parabrahman el Maldito.