Es una pregunta que, últimamente, me ronda la cabeza. Cuanto más pasa el tiempo, más aprendes a ser independiente, a no esperar nada de nadie y a no confiar en cualquiera. Por ende, si no se es capaz de otorgar esa "presunción de inocencia" hipotética a la gente, ¿por qué confiar en ella para llevar un sistema que rija una sociedad?
Como comunista, el respeto a la dignidad del individuo, el considerar que la vida de cada uno vale lo mismo a priori y el confiar en las personas son valores que me parecen un must a la hora de buscar esa sociedad ideal, sin embargo; en la vida real son valores complicados de aplicar en el día a día. Ejemplos:
- Quejarse de la corrupción de arriba cuando tu cuñado te hace la chapuza en negro.
- Fiarse de cualquier random por el mero hecho de ser otra persona es una fase que se cura con el tiempo, y al final aprendes a ser precavido de cara a las relaciones sociales.
- Considerar que la vida de cada individuo tiene el mismo valor, ergo deben ser tratadas igual. Sin embargo, los seres humanos otorgamos distintos significados a distintas cosas, ya sean personas, animales, objetos con cierto valor sentimental, etc., que es lo que otorga la auténtica validez a esas cosas de cara al individuo, por lo que en la realidad, no todo vale lo mismo en la práctica. Es cierto que esa importancia se puede alterar, pasar de algo positivo a negativo, pero dificilmente a algo neutro.
Al fin y al cabo y como se suele decir, el gobierno de un país es un reflejo de la sociedad del mismo, y es ese gobierno quien rige el sistema dominante, ergo el propio sistema acaba siendo un reflejo de la sociedad.
Si somos incapaces de creer en las personas, ¿podemos creer en la democracia?
Aclaraciones previas a mi punto de vista:
No estoy tachando a nadie de inmoral por tener una mentalidad arisca de cara a las otras personas, ni soy un happy flower de la vida que os dice que abracéis a vuestro vecino, ni creo en las personas de primera mano. Yo soy más de 50/50 y considero que la confianza y el respeto hay que ganárselos. No creo que pueda ser inherente a todo ser humano.