TU ÍNDICE DE PULSIÓN SEXUAL
Has participado en el cuarto Estudio sobre Conducta y Preferencias Sexuales de los Usuarios de Internet en España. Este es tu informe personalizado de Índice de Pulsión Sexual.
TU IPS:
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Tu Índice de Pulsión Sexual es superior al 90% de la muestra que ha tomado el test. Ello probablemente indica que eres una persona que ha experimentado múltiples vivencias sexuales, que eres atrevido e imaginativo para buscar nuevas situaciones, que antepones la consecución de tu propio placer a consideraciones éticas o morales, que manifiestas una gran libido o deseo sexual, que te gusta también auto-satisfacerte, y que le das uso sexual a Internet. En suma, y dicho con pocas palabras, eres puro sexo. El sexo eres tú.
EXPERIENCIA:
Tus respuestas indican que has pasado por un número de experiencias sexuales similar al de la media de la población que ha pasado por el test. O dicho de otra forma, tu repertorio sexual y el número de parejas sexuales que has tenido hasta el momento son similares a la media. Podemos decir que tu forma de vivir el sexo supone un equilibro entre la pura y simple satisfacción del deseo sexual, y la vertiente lúdica inherente a la conducta sexual humana. En tu comportamiento habitual no destacas por buscar nuevas situaciones ni modos de disfrutar de tu sexualidad. Esto no quiere decir que no sientas inquietudes por variar tu repertorio sexual o buscar nuevas sensaciones; lo que queremos decir es que lo haces en la misma medida que la media.
ATREVIMIENTO:
Las respuestas dadas al test revelan un destacado componente de osadía en tu conducta, por encima de la media. Ello indica una personalidad sexual intrépida, aventurera, amante del riesgo y las emociones fuertes. La idea de sexualidad es innovadora, emprendedora y en cierto modo, impulsiva. No se le da tanta importancia a la cantidad de experiencias sexuales vividas, sino a la intensidad de las mismas. Subyace a estas características una clara pulsión exhibicionista y, en el fondo, una atracción por el lado oscuro del sexo, unida a ciertas tendencias auto-destructivas. La búsqueda del placer a través de situaciones arriesgadas desde el punto de vista social o sexual tiene mucho que ver con el eterno dualismo humano, la mitológica tensión Eros-Tanatos (pulsión de vida/sexo - pulsión de muerte/destrucción). De alguna manera, se puede decir que desprecias la seguridad y la comodidad. Necesitas de innovación, tensión sexual constante para sentirte vivo. Debido a esa necesidad vital de satisfacer la sexualidad afrontando situaciones con alto componente de riesgo, es muy probable que hayas vivido muchas más experiencias sexuales que la media, y que hayas disfrutado de gran variedad sexual. Así mismo, de tus respuestas al test se desprende que probablemente eres una persona muy sexual, con una gran libido y un apetito muy desarrollado. Y aunque obviamente eres persona de gran fantasía sexual, buscas con mucha intensidad que tus deseos sexuales se hagan realidad, y sueles conseguirlo.
INTERNET:
La red es significativamente importante en tu vida sexual. Te excita, te erotiza. Más que un medio para tu placer, es un fin en sí mismo. Esto es especialmente cierto en los valores más extremos de la escala. De tus respuestas se deduce que, con gran probabilidad, pasas un número de horas superiores a la media conectado a la red, y por tanto estás expuesto a estímulos sexuales y tentaciones más que la media de la población; como muy bien sabes, en Internet a veces tienes la impresión de que sin buscar sexo, el sexo viene a ti.
AMORALIDAD:
Tu respuesta sexual ante las situaciones en las que intervienen consideraciones de tipo ético o moral es equilibrada. Es decir, en algunas ocasiones tu pulsión sexual gana la batalla a tu escala de valores morales, y en otras es tu sentido ético quien se impone. Esta actitud te sitúa en la media de la población. Tu comportamiento ante conceptos clave como la fidelidad, el respeto a la intimidad ajena, etc. no difiere del que muestra la media de la población: en unas ocasiones se impone tu escala de valores, tu sentido moral, y en otros en cambio, gana el impulso, el deseo... Se puede decir que, en general, para satisfacer tus pulsiones sexuales atiendes de alguna manera a las normas sociales, o por lo menos lo haces en la misma medida en que lo hace la mayoría de la muestra.
AUTOERÓTICA:
Según tus respuestas, tiendes a la auto-satisfacción sexual en la misma medida que la media de la muestra. Para tí la práctica del onanismo es algo natural; ni abusas de ello ni te privas, al menos comparándote con la media de la población. Podemos decir que en general satisfaces tu pulsión sexual en encuentros sexuales con otras personas, o bien, no utilizas la masturbación para reemplazar dichos encuentros ( y si lo haces, no es en mayor medida de lo que lo hace la población que ha contestado al test) .
LIBERTINAJE:
Tu nivel de carga sexual, tu libido, son superiores a la media, según tus respuestas al test. Eres una persona con muchas ganas de sexo, un ser muy erótico lleno de deseo sexual. Se puede afirmar que es extraño que desperdicies una sola ocasión para tener un encuentro sexual. Y en efecto, esa carga libidinosa que atesoras es muy probable que te haya hecho disfrutar de un número de experiencias sexuales más alto que el promedio. Se te podría definir en el plano sexual como desenfrenado, en el aspecto de que una vez sientes el impulso sexual, tu inquietud crece hasta que consigues la plena satisfacción. Se percibe también un componente de amoralidad latente en tu conducta sexual; es decir, el ansia de satisfacer tus deseos te lleva en ocasiones a olvidarte, consciente o inconscientemente, de las reglas y normas sociales. Es muy probable que hayas sido muy precoz sexualmente, tanto al iniciarte en la auto-satisfacción como en las relaciones sexuales con otras personas. Con una puntuación muy alta cercana al máxima, esta afirmación se puede hacer rotundamente. En general, según tus respuestas, se puede decir que te dejas llevar por la libido. El impulso sexual puede contigo y, aunque no necesariamente eres inmoral, en la práctica si entre ti y el objeto de tu deseo se interpone la moral, apartarás la moral a un lado y buscarás satisfacer tu deseo. Ello puede implicar infidelidad a la pareja, tener encuentros sexuales en lugares arriesgados, y una serie de situaciones sexualmente estimulantes.