Cortometraje sobre dos pilotos de la WWII (alemán y aliado) enfrentados durante una refriega aérea.
La verdad que el final es bonito, y no conocía que habían ocurrido historias similares a lo que dice el texto del final. Es cierto que la guerra convierte en bestias a la gente, pero te alegra saber que nunca se pierde ese toque que nos hace humanos, y supongo historias como estas tuvieron que repetirse más de una vez a lo largo de la segunda guerrra mundial