#141 Pues mira, yo pensaba que sí. Me habré confundido con otro compañero del foro con un avatar parecido XD
Aunque coincido contigo, te diré que una cosa es la teoría y otra la práctica.
Y sí, algunos entran con vocación, con la mentalidad de "yo vengo aquí y arreglo el puto mundo"
Claro, hasta que ese héroe ve que detiene docenas de veces al mismo carterista y sigue sin pasarle nada.
Cuando le piden que se meta en un tiroteo y que si quiere protección contra balas "LAL, cómpratelo tú, majo".
Cuando el Estado que tiene que defender no le proporciona el material adecuado para ejercer tus funciones.
Cuando esa Constitución que debe defender y esas leyes que tiene que hacer valer los políticas se las FUMAN como les sale de los cojones.
Cuando esos políticos por un lado los utilizan como si fuesen peones desechables y a la vez los llaman mil nombres. O los utilizan para sus campañas políticas.
Cuando una parte de la población a la cual debes proteger te desprecia, llamándote perros del Estado.
Entonces ese ardor guerrero y esa vocación que reclamas en tu post (de manera justa, lo recalco, pues es así como debería ser), se va a la PUTA.
Que podrías decir "lol, Manolete, si no tienes los cojones para torear, no te metas". Y sería justo. El problema es que has metido a Manolete a torear y en vez de traje de luces está vestido con unas chanclas de 1 euro, un mono de Fontanería Manuel, la capa es un saco de patatas, el estoque es una espada de juguete del todo a 100, el sombrero es una gorra de la Caja Rural de Tomelloso y el público lo está llamando hijo de puta mientras torea un toro con cuchillos eléctricos encendidos atados a los cuernos.