Personalmente no me parece muy estético que su hermana esté en el gobierno. Aunque revisando el contexto y sabiendo qué es, e implica, ser jefe de campaña en unas elecciones, el resultado es más que lógico. Debió ser altamente complicado encontrar un jefe de campaña competente en su momento que no estuviera contaminado por algún partido. Si hubiera elegido a alguien "de garantías y con trayectoria", habría sido moverse entre un campo de minas. Sería prácticamente imposible que este no hubiera trabajado con alguien implicado en algún escándalo por el propio estado actual de la política en Argentina. Pensad cuantas personas de confianza para liderar una campaña política puede haber en las que Milei hubiera podido confiar.
Sobre la subida de impuestos, a saber lo que se habrá encontrado para, como liberal, tomar esa decisión. Lo que sí está claro que esos mensajes rotundos son complicados luego de cumplir salvo que tengas una idea muy clara de lo que te vas a encontrar.
Vuelvo a recorar que hace semana y poco que este hombre está en el poder, y que la alternativa de seguir por el camino anterior era mucho peor de lo que pueda pasar ahora. Ya advirtió que las cosas empeorarían antes de mejorar, aunque nadie será capaz de decir hasta que punto lo harán y cuando tendrán los argentinos la sensación de estar mejor que antes. Se ha aletargado a la población bastante tiempo con la droga del dinero público, al quitarla vendrá la abstinencia irremediablemente.
Por ahora las medidas están afectando a la clase política mayoritariamente, se han reducido los ministerios, secretarías y otros puestos políticos, no renovados contratos públicos y cancelado obras. Todas esas medidas destrozan a los políticos. Van a haber efectos secundarios en los ciudadanos, eso seguro, pero por ahora Milei, mayoritariamente, está cumpliendo el plan.
Este tio es un excéntrico, tiene sus cosas, pero Milei no está de presidente para caeros bien ni tener una vida idílica, está de presidente para intentar arreglar probmemas muy graves producidos por una clase política sin control, una clase política que se ha dedicado a saquear a los argentinos en cuanto ha tocado poder. Por eso es tan importante que este tipo triunfe, para demostrar que revertir la expansión infinita de los estados actuales es posible. Si no, estamos condenados a terminar siendo esclavos de la clase política dentro de un estado infinito. Tenedlo en cuenta, cada paso del estado supone el fin de una parte del sector privado y el fin de una parte de la libre elección del ciudadano. De una empresa puedes decidir no consumirla, pero del estado no hay escapatoria.
Quiero creer que es posible un cambio así en Argentina y en el resto de hispanoamérica por el bien de todos. El tiempo revelará si finalmente era posible.