Es un secreto a voces que a lo largo del último año la guerra contra los tramposos se ha recrudecido en Valorant.
Cualquier jugador puede haber ido notando como la psicosis ha ido en aumento, y ya no era tan infrecuente encontrar de vez en cuando jugadores que te podían hacer sospechar, o stats de disparo milagrosas al alcance de muy pocos.
En esa línea, uno de los métodos más extendidos y que más quebraderos de cabeza ha dado a Riot ha sido la utilización de placas Arduino, las cuales al ser un sistema externo al propio ordenador, facilitaban el eludir a Vanguard.
Ahora, a fecha de 25 de abril, una nueva actualización está acabando con gran parte de los usuarios que utilizaban el mencionado método de Arduino, el cual mediante detección de patrones y colores podía automatizar el apuntado. Las redes se están llenando de clips y tramposos siendo detectados por el anticheat, apareciendo en pantalla el error VAL-5, quedándose así fuera de juego.
Además, a modo de recordatorio, hace apenas unas semanas se publicaba una lista de más de 200 baneados, los cuales además se categorizaban por rangos, viendo así que el problema era mucho mayor, especialmente en rangos altos.
Grandísimas noticias que están teniendo una recepción muy positiva, incluso de parte de la comunidad de otros videojuegos. Es evidente que esto es una carrera de fondo, pero hoy se ha dado un duro golpe contra la lacra de los cheats, y Riot sigue siendo la punta de lanza en esta guerra.