En general casi ninguna ciudad me ha decepcionado, sobre todo si vas con la compañía adecuada y no te limitas a hacer el turista todo el rato, pero siempre hay algunos casos que te esperas otra cosa o te decepcionan en parte:
Roma: No es que me decepcionase, pero quitando los restos romanos (que aparte limitan el desarrollo de la ciudad en vez de integrarlos en ella), son mucho más bonitas y dinámicas otras ciudades en Italia (Florencia, Venecia, Verona, Padova...) Es decir, está bien, es como un macropueblo, muchas cosas que hacer y gente maja, pero no es la repera para ser la capital.
Madrid: Un caso un poco parecido a Roma, está bien para vivir, pero no me parece ni muy bonita ni muy turística, comparando por ejemplo, con Barcelona, que en este aspecto le da bastantes vueltas
Valencia: Hubiese sido una decepción si no fuera por la maravillosa ciudad de las artes y las ciencias, que solo por eso ya merece la visita. El resto interesante de la ciudad, sin embargo...se puede ver en medio día o menos...
Moscú: Mola porque posiblemente sea uno de los sitios más cercanos que se puede considerar exótico en cuanto a lo diferente que es tanto la ciudad como la vida allí como sus gentes...eso si, quitando la emoción por el choque cultural, es una ciudad fea quitando los pocos puntos turísticos, pero lo peor, sin ninguna duda, son los rusos, maleducados y hoscos como ningunos: es ley general empujar en el metro, en cualquier cola o simplemente para apartarte de su camino. No comprenden que no hablas su idioma y se enfadan. Llevan unas caras por la calle que da miedo, incluidas unas apáticas pero buenorras chicas. Eso si, con vodka son de lo más majos. La ciudad está hecha a lo grande, quiero decir, es muy cansina porque hay muchos espacios abiertos y distancia entre unas cosas y otras. Lugares enmurallados que no dejan el libre disfute como la zona del kremlin o con grandisimas colas como la tumba de Lenin, mucha diferencia de riqueza y pobreza.