LA PATRULLA-X DEL MAR
Si te pilla intentando cazar, te apuñala
Los científicos que estudian las ballenas en su terreno se habían percatado de que algo raro había en las interacciones entre orcas y jorobadas. Es por ello que un grupo de científicos hace un llamado internacional a que otros colegas compartan casos documentados de estas interacciones. Como resultado, en julio de 2016 se publica un paper en el que se analizan 115 casos documentados de encuentros de orcas con ballenas jorobadas. Las conclusiones son claras: estas ballenas tienen entre sus pasatiempos dedicarse a jorobar (badum tss) a orcas que están cazando.
Mapa de los casos documentados.
Los números indican la cantidad de casos documentados en dicha área
Una jorobada adulta es prácticamente inmune a las orcas por lo que, si se cruzan fortuitamente, lo normal es que se ignoren mutuamente. Pero de los 41 casos en los que son las jorobadas las que se acercan a las orcas, en el 89% se trata de jorobadas rescatando/ayudando a otras especies. En el 11% restante, estaban ayudando a otro miembro de su misma especie.
Si cuando llegan ya es demasiado tarde, suelen perseguir y molestar a las orcas. En uno de los casos documentados (dejo el vídeo a continuación del párrafo), 2 jorobadas llegaron para intentar evitar que las orcas se comieran a una cría de ballena gris (que estaba junto a su madre, que fue incapaz de defender a su vástago del grupo de depredadores). Aunque fracasaron, siguieron llegando hasta 14 jorobadas más y siguieron a las orcas durante 437 minutos (7 horas y cuarto, aprox). Vamos, más pesadas que Jazztel cuando se entera que no estás con ellos.
¿Por qué aparecen "específicamente" cuando las orcas atacan a otros mamíferos?
Aunque de los 115 casos estudiados sí hay 2 referidos a peces luna; el resto están relacionados con otros animales mamarios (otros cetáceos, otarinos y fócidos). Aunque pudiera no parecer un detalle importante sí lo es, ya que hay distintas variedades de orca y, entre sus muchas diferencias, está la especialización predatoria por lo que hay orcas que se alimentan principalmente de pescado mientras que otras se alimentan principalmente de mamíferos marinos.
Lo más probable, según los firmantes del estudio, es que las orcas que cazan pescado suelen ser más silenciosas mientras que las que cazan mamíferos suelen emitir sonidos para avisar al grupo cuando detectan una presa así como llevan a cabo ataques coordinados que son más prolongados. Por tanto, quizá las jorobadas se limiten a actuar en respuesta a los sonidos de ataque de las orcas, acudiendo al rescate sin saber exactamente qué está siendo atacado.
¿Por qué ayudan a otros seres vivos? ¿Altruismo?
Pues, según el estudio, sus hipótesis son tres (en mi opinión, 2 de las hipótesis las dicen por curarse en salud, ya que no me parecen demasiado plausibles):
- Razones de parentesco: aunque son animales gregarios, su grupo es pequeño y volátil, ya que más allá del vínculo madre-progenie la rivalidad entre machos es atroz lo que impide que los grupos sean estables y perduren en el tiempo. Pero son animales de "costumbres" por lo que suelen frecuentar los mismos lugares y repetir cíclicamente el recorrido marino que les enseñó su madre por lo que, cuando acuden a ayudar a una jorobada (sea actualmente de su grupo o no) es probable que estén ayudando a un pariente lejano. Por lo que quizá tienen la costumbre de acudir a ayudar a otros miembros de su especie. Esta hipótesis podría servir para explicar los casos en los que ayudan a otras jorobadas, aunque a mí me parece cogida con pinzas y deja sin explicar el resto de casos.
- Reciprocidad: quizá al ayudar a otro animal esperan recibir algo a cambio. Se podría esperar que una jorobada ayudando a otra es un quid pro quo: hoy te ayudo yo, mañana ayúdame tú. Aunque parece difícil de justificar la ayuda que puede recibir una jorobada de una foca, un león marino o de un pez luna.
- Altruismo: lo hacen porque pueden y porque quieren ayudar desinteresadamente a un animal en peligro. O quizá un grupo de orcas que no puede comer hoy puede tener menos posibilidades de sobrevivir, siendo un grupo menos de orcas que se podría comer a su futura cría.
Quizá podría ser que, lo que empezó como una ayuda intraespecie (las jorobadas se comunican entre sí por lo que quizá se pueden avisar de que están siendo atacadas) acabo derivando a una "simple" reacción ante las señales de ataque de las orcas, sin saber si al llegar se encontrarían a otra jorobada en peligro o no.
¿Sólo molestan a orcas?
Pues parece que no, ya que hay documentados casos en los que también intentan interrumpir la caza a falsas orcas y calderones (especies de delfines). Pero me parece que ni hay tantos casos documentados ni tampoco es el motivo del estudio.
¿La jorobada que intentaba prevenir a una científica del ataque de un tiburón?
Nan Hauser, una científica con 28 años de experiencia con cetáceos dice que tuvo un encuentro con una jorobada en el que mostró un comportamiento que nunca había presenciado: la empujaba con "delicadeza" y sin agresividad fuera del agua, intentaba colocarla a su costado como cuando protegen a las crías de depredadores... no entendía qué pasaba hasta que vio un tiburón en la zona.
La ballena jorobada, una especie que el ser humano estuvo a punto de erradicar
Aunque no es el tema del hilo, me parece importante traer a colación que, tras siglos de pesca y, principalmente, tras un siglo de captura intensiva (imposible calcular las decenas de miles de ballenas que se cazaron en el siglo XX); la población de yubartas (jorobadas) en el Atlántico sur se redujo hasta los 450 ejemplares.
Aunque en 1937 UK ya advertía del peligro que corrían las ballenas, no fue hasta los años 60 y 90 que se empezaron a tomar medidas efectivas. Desde entonces hasta ahora, la población de jorobadas del Atlántico sur se ha conseguido recuperar y se calcula que actualmente pueblan sus aguas unos 25.000 ejemplares de estos cetáceos.
RESUMEN DEL HILO EN UN VÍDEO DE UN (1) MINUTO
Jorobada protege a una foca del ataque de un grupo de orcas
"Es el mercado, amigas orcas", ballena Rato