Ciclo de cine: Corea del Sur, con menos Song Kang-ho

Peli de gángsters con sus dosis de pelea en multitudes a palazo y cuchillazo limpio (o no tan limpio con el barrizal), sus giritos de guión para sorprenderte y el romance que no puede faltar en una película de este estilo. En línea general me ha gustado bastante la película y en ningún momento se me ha hehco pesado y me ha mantenido atento a la historia.

Si que quizás el romance me ha parecido un poco metido demasiado con calzador y no ha sido desarrollado demasiado bien a mi parecer.

Me esperaba que la película acabaría con el director siendo asesinado en la sala del karaoke por el nuevo jefe del grupillo mientras el "jefazo" estuviera cantando. Me habría parecido un puntazo.

Hace ya bastante que me vi Sympathy for lady vengeance, pero diría que ésta la pondría por encima suyo y por detrás de Oldboy. De la película sin duda me quedo con Shin Ha-kyun que hace un trabajo sublime durante toda la película, el ritmo de ésta que es muy bueno (la primera parte de la película presentándote la miseria de los dos hermanos y presentándote el problema y en la segunda parte con las 2 tramas de venganzas hilándose entre si) , la fotografía y como no se corta el pelo en ningún momento con las escenas explícitas.
El final me ha parecido muy poético, da igual si el motivo fuera bueno o malo, que si intentas arreglar tus problemas con violencia, al final también vas a recibir violencia.

Aún sin tener una visión muy extensa sobre la escena de cine coreana como para hacer ciertas afirmaciones me atrevería a decir que esta es una de esas películas que sirven como rito de iniciación para muchos, una de esas películas que rompen las barreras de su país y son capaces de recoger a manadas de espectadores que llegan para quedarse.

En mi caso no fue de las primeras que me introdujeron en esto (de eso ya se encargó ki-duk como ya he comentado alguna vez) pero si que fue la primera película que vi de este hombre, Park Chan-wook.

Un director que normalmente disfruto más en su vertiente alejada del thriller criminal, de hecho se han dado algún que otro caso incluso en estas ediciones de los ciclos como por ejemplo con 'Thirst' y JSA, gratas sorpresas ambas. Mi película favorita de su obra es otra que también se aleja del thriller criminal, 'The Handmaiden'.

En cuanto a esta trilogía, es 'Oldboy' la que más me gusta y por diferencia frente a sus otras dos acompañantes. Recalcaría que son películas que vi hace muchos años, seguramente de haberlas revisionado por el ciclo, a día de hoy, las valoraría más ya sea por todo el cine consumido desde aquellos años y por saber apreciar y valorar cosas que antes no reconocía.

Recalco también que el thriller es uno de los géneros que más pereza me da revisionar por el hecho de que cuando tu película se basa en como juegas las cartas con el espectador y este ya se sabe la jugada pierde mucho fuelle. Pero vaya, que nada de esto ha supuesto ningún impedimento para poder volver a disfrutar de este trabajo tanto o más como la primera vez con ese apoteósico final.

Parar finalizar y cerrar un poco esta opinión, un ejemplo de cine coreano que disfruto revisionando es el de Lee Chang-dong, quien también es mi director favorito y quien pienso que maneja el llamado "poetic cinema" con más maestria en el país asiático. 'Burning' me parece un ejemplo perfecto de esto que comento y sobre las distintas posibilidades y significados que ofrece la propia película por más veces que uno la vea.

Al ser un thriller de tipo puzzle que se basa en la revelación final, como muchos otros de este estilo, no se presta a hacer revisionados ya que el impacto de la primera vez se pierde para siempre, pero en mi caso tras más de 10 años no me ha impedido disfrutar de las muchas virtudes que tiene esta pedazo de película.
Sabiendo ya de qué iba el misterio, quién era realmente Mi-do desde el principio, he perdido la sorpresa y la confusión iniciales muy importantes del primer visionado pero he podido prestar atención en cómo está hilada la narración hasta su conclusión y considero que tanto el guión como el montaje me parecen perfectos. Las transiciones de los flashbacks siempre me gusta que estén bien hechas (me suelo fijar en otras pelis también) y en este caso además van acompañadas de una banda sonora muy chula.

La actuación de Choi Min-sik es monstruosa e irrepetible, el papel de su vida sin duda y eso que en I Saw the devil también tuvo un papel muy extremo. El actor que hace de Woo-jin Lee también está magnífico y me extraña mucho no me habérmelo encontrado más, ya que además tiene buena presencia (es alto el cabrón).

No me quiero liar mucho más a estas horas, simplemente para mí esta peli tiene todo lo que buscaba cuando empecé a ver cine asiático, en busca de experiencias distintas como ya comenté en la peli anterior. Además está maravillosamente realizada con el genio e ingenio de Park Chan-wook. Ojalá haber ido ese año a Sitges para disfrutar en sala de esa intensidad dramática del final y de esta frikada mítica: