Anoche vi Okja. Me quedé sorprendido, no sabia que esperarme de este director, había visto la acongojante Snowpierce o la desconcertante Crónica de un asesinato, pero sabia que este film no iba a ir por ninguno de esos derroteros. Más que una crítica a la industria cárnica, me ha parecido una crítica brutal a la hipocresía y a la ceguera voluntaria, que a la vez se hace en forma de un film de aventuras tremendamente divertido y con unos diálogos y una forma de ser genial e inteligente.
Leí a posteriori que quizá era el alma de estudios Ghibli llevado a la acción real, y que razón. Con solo una escena genialmente emotiva, relajada y trepidante ya nos enseña que Okja, no es un animal cualquiera, es un reflejo de algo más, y como contraen juntos, el cochino y la niña, esa deuda en las primeras escenas que no es más que una amistad profunda y generosa.
Bong Joon da en la clave y nos presenta la lucha a favor de la justicia con la honestidad como arma, que nos enseña que de ninguna forma esto último debe faltar en la vida.
Me he enamorado de esta película y tenia que comentarlo por aquí.