Me refiero a que el hombre no siempre es reflexivo y lógico, en este tipo de partidos se juegan su dignidad futura porque la afición no le perdonaría una cagada así. Su impotencia y rabia del momento han hecho que se comportara como se ha comportado. Eso le puede pasar a cualquiera.
Y como le puede pasar a cualquiera, cualquiera puede recibir un castigo ejemplar
Imaginaos que estáis en su situación. En ese momento habéis sacado la fiera que lleváis dentro y le habéis pegado la patada al delantero mientras estaba en el suelo. Os dais cuenta de que eso está mal, pero recibís un castigo de, pongamos, cinco partidos, que merman al equipo para toda la temporada.
Pues no tendria la dignidad para mirar a mis compañeros a la cara
¿Acaso no sentiríais impotencia? ¿Acaso no aumentaría vuestra rabia y por consiguiente ese instinto asesino que habiais sacado durante el partido? ¿Y si en lugar de castigaros, hubieran hablando con vosotros seria pero comprensivamente y hubieran tenido paciencia, castigándoos durante uno o dos partidos pero explicándolo con calma en lugar de con furia y resentimiento? ¿No os volveríais más dóciles y probablemente aprenderíais muchísimo mejor que ese acto no se puede volver a repetir?
Lo siento, soy de la vieja escuela: Zapatillazo limpio, y calentito a la cama