#26
- No se preocupe caballero, el señor Segismundo es un hombre de gran corazón, ya le entregó un tazón de sopa a esa anciana antes de que llegase usted y el resto de invitados, a cambio tiene prohibido aceptar comida de los clientes, dice que así evitar que vengan aquí todos los mendigos y refugiados de este lado de Palestina.
#27
Treia se ruboriza y aparta la mirada, luego su rostro muestra cierta expresión de disgusto.
- He vivido toda mi vida en la naturaleza, una dama como usted no sabrá lo cruel que puede ser la naturaleza, incluso con quienes más cerca estamos de ella.
#28
Lothar te mira fijamente y te ofrece una sonrisa amigable, pero descaradamente igual de falsa que tu comentario.
- El Señor Giovanni es un hombre de inmensa bondad, tal es así, que incluso los miembros de las clases bajas pueden encontrar su favor.
Por un momento el rostro de Lothar te resulta familiar.
Tirada de dados: (Percepción 1 + Alerta 1) Dificultad 6 = 5, 3 (Ningún éxito)
Has visto demasiadas cicatrices de batalla como esas, quizá le confundes con alguien a quien cortaste la cabeza algún día.
- Respecto a tu caballo, pregunta a Roderigo, es él quien está a cargo de la organización para subir hasta la mansión. Ahora, te pido que me disculpes.
Lothar te da la espalda y camina hacia un lateral de la posada.
#29
Lothar se acerca directamente a ti e interrumpe tu conversación con Florian y André.
- ¡El joven Durán Velasques-Quintana! No es necesario andarse con cuidado, para el Señor Giovanni sois todos igual de importantes, puedes preguntarme lo que necesites directamente a mi. En respuesta a tu duda, simplemente me acerqué a Marinna por especial admiración hacia su belleza. -Sonríe y mira con complicidad a tus compañeros de mesa, luego vuelve la mirada nuevamente hacia tu rostro y con delicadeza te sujeta la mano. -Veo la delicadeza de tus manos y puedo reconocer en tu piel una vida de arte y literatura. -Se acerca tu mano a la cara, justo debajo de la nariz, tan cerca que puedes sentir su respiración; respira tan fuerte que parece que está oliéndote la mano.
#30
Observas que los soldados miran al frente, pero uno de ellos gira levemente su cabeza mientras murmura algo a su compañero, este lanza una mirada a Danna y los dos ríen silenciosamente. Tienes la sensación de que son personas hasta cierto punto pacíficas. Por otro lado, el hermano Clemente se ha quedado detenido en un rincón y observa fijamente a Lothar, por su mirada parece que vaya a estallar de nuevo en cualquier momento.
Danna sonrie educadamente a Treia y se sonroja ligeramente
- Mis disculpas, tiene razón, desconozco de los peligros que puede ofrecer la naturaleza, pero ya que usted es toda una experta quizas pueda contarme algunas de sus hazañas-
La joven acaricia su vestido mientras mira disimuladamente las ropas que lleva Treia
Por un momento, la confusión se adueña de Velkan. ¿Acaso había expresado sus pensamientos en voz alta? Estaba seguro de que no, pero probablemente el exceso de cerveza le estuviera nublando la razón y, sin quererlo, se le hubiese soltado la lengua.
Los preparativos del viaje a la mansión Giovanni era algo que le preocupaba, por lo que se dirige a la entrada de la posada, donde se encontraba Roderigo acompañado de dos guardias, dispuesto a sonsacarle cuanta información fuera posible: con qué medios iban a ir (había invitados que no disponían de su propia montura), dónde se situaba la mansión, y qué sabía acerca del Sr.Giovanni y de Lothar.
Durán
La sonrisa se me congela en la cara y mi corazón palpita mientras el vello de mi cuerpo se eriza al notar la respiración de Lothar en mi piel, noto algo animal y peligroso. Instintivamente paso fugazmente la mano que tengo libre por mi muslo para notar el frío de una pequeña daga que escondo.
Trato de recomponerme, y con suavidad retiro mi mano - Así es, ¿es acaso un interés en el arte y la literatura por parte del siñore Giovanni lo que me trae aquí? desde luego tengo conocimientos suficiente es esas disciplinas, espero agradar a su señor -
Me alejo de los jovenes observandolos mas intrigado y en especial a la bella Marianna, desde un principio mi llegada a este lugar a sido extraña y la compañia que me rodea lo es más mientras pienso si puedo confiar en los que me rodean
#33
Roderigo tiene un tono de voz amigable y un trato realmente amistoso, no hay nada en él que despierte animadversión, ni te genere la más mínima sensación de amenaza.
-Buenas noches, tu nombre era Velkan ¿cierto? Buenas preguntas las que me haces; verás, el Señor Giovanni ha dispuesto dos coches de caballos con espacio para 13 invitados.
-Los coches son espaciosos y realmente cómodos, pero si aun así prefieres viajar en tu propia montura, eres libre de hacerlo, de lo contrario puedes atarla tras el carruaje y así nos acompañará, aunque quizá lo mejor sería que busques a alguien que cuide de ella en tu ausencia, junto a la posada hay un establo y su propietario es un hombre honrado con gran amor por los animales.
-La mansión se encuentra a unas tres horas a caballo, partiremos mañana por la tarde y llegaremos unas horas antes de la cena, para que podáis conocer al resto de invitados, que sin lugar a dudas os resultarán personas de lo más sorprendentes.
#34
Lothar realiza una tirada: (Percepción 3 + Alerta 3) Dificultad 6 = 2,6,7,6,8,1 (4 éxitos)
Lothar se acerca a ti y te dice en voz baja:
-No es en absoluto necesario que empuñes la daga que guardas, pero como consejo personal, hacerlo sería una completa estupidez.
Luego continúa en un tono normal, para que cualquiera pueda oírle:
-Por esos motivos y muchos más, desde luego el Señor Giovanni está deseando que le deslumbres con tus conocimientos.
Luego te deja y se dirige al centro de la sala.
#32
Tirada de dados: (Manipulación 2 + Expresión 1) Dificultad 8 = 7,8,5 (1 Exíto)
Treia te mira de soslayo, sus ojos expresan cierto desprecio.
-No es la primera vez que la curiosidad y el morbo llevan a alguien a interesarse por mi vida. Lamento decepcionarla, pero...
Lothar alza la voz interrumpiendo las conversaciones de los presentes:
-¡Os ruego que me disculpéis por olvidar avisaros que la cuenta corre a cargo del Señor Giovanni! -Dice mientras muestra su mejor sonrisa.
En ese momento, el hermano Clemente se levanta de su banco y grita:
-¡El mal! ¡El mal encarnado! ¡No es más que un secuaz lamedor de botas del Diablo, Claudius Giovanni! -Escupe al suelo tras pronunciar el nombre. -¡Os aviso, buena gente! ¡Vuestras mismas almas están en peligro! ¡Escapad de este lugar maldito!
Lothar contempla al monje y gruñe:
-¡Fuera!
-Tus brujerías nacidas en el infierno son inútiles frene a un hombre de Dios! -Contesta a gritos Clemente. -¡Expongo tu maldad ante todo el mundo!
Lothar suelta un bufido burlón y murmura:
-No necesito ninguna brujería nacida en el Infierno, estúpido.
Hace un gesto a sus guardias, que agarran al monje y le hacen caer al suelo, para llevárselo de la sala común mientras el hermano Clemente no deja de lanzar patadas, gritos y mordiscos.
André interviene diciendo:
-Dejad al pobre hombre ¿No veis que no es más que un viejo demente? -Se acerca a los soldados. -Soltadle, me opongo a ver cómo maltratan a un viejo indefenso.
Lothar se acerca dando largos pasos que retumban en el suelo de madera.
-¡¿Te atreves a cuestionar mis órdenes?! Cierra la boca muchacho, tu osadía podría costarte la invitación ¡¿Es eso lo que quieres?!
-¡No venderé mis principios por una cena en la mansión de alguien que tolera esta clase de abusos! -Replica André.
-¡Has tomado una decisión! Abandona la posada de inmediato si no quieres que ordene a mis guardias que te traten del mismo modo. -Responde Lothar con el rostro enrojecido por el arrebato de ira.
El muchacho abandona la posada y los soldados salen tras de él mientras arrastran a Clemente al exterior, luego la puerta se cierra.
Lothar se gira mira mira al resto de ocupantes de la posada, guarda silencio un instante y luego recupera la compostura, pero con expresión seria y autoritaria dice:
-¿Alguien más tiene algún espectáculo que ofrecer esta noche?
Podéis intervenir o guardar silencio.
Durán
(me santiguo mientras observo paralizado la rudeza con la que tratan al monje, las palabaras que Lothar en un susurro me ha dicho aún hacen que se me ericen los pelos de la nuca, con la boca medio abierta no soy capáz de pronunciar ninguna palabra)
Velkan
Roderigo parecía un gran hombre, por fin había encontrado alguien "normal" en la taberna con quien intercambiar más de dos frases con sentido. Tras agradecerle efusivamente su gentil ayuda, Velkan contempla las opciones que ante él se abrían. Sin duda, la mejor opción era seguir su consejo y dejar la montura en el establo próximo a la posada. Como era ya de noche y no partirían hasta las tres de la tarde, decide aparcar el tema hasta la mañana siguiente.
De pronto, una poderosa voz se alza en medio del tumulto. Era la voz de Lothar, anunciando que la cuenta corría a cargo del Sr. Giovanni. No le dio tiempo siquiera a expresar su júbilo por la buena nueva cuando el hermano Clemente protagonizó otro de sus espectáculos, que acabó con él y otro de los invitados expulsados de la taberna.
Realmente, ese charlatán le estaba empezando a cansar con sus estupideces y, si no se hubiese adelantado el mayordomo, le hubiera echado a patadas él personalmente.
Tras la vuelta del silencio a la estancia, se sirve otra jarra de cerveza y la saborea con una ligera sonrisa en la boca. La cerveza gratis sabe mejor. Esta iba a ser una buena noche...
Danna pone cara de sorpresa ante el comentario de Treia pero después se queda aún más sorprendida con el espectáculo que ha montado en la taberna el señor Lothar, se queda sin palabras observando desde un rincon de la estancia esperando a ver que pasa
Ian observa la escena protagonizada por el pobre monje y suspira.
Realmente, la reacción de Lothar no le gustó nada, pues vió innecesario ese abuso hacia el hombre, pero decidió callar, pues su objetivo era más importante ahora mismo que el riesgo de hacer enfadarlo nuevamente por unas opiniones que no cambiarian nada.
Desvió de Lothar su mirada para ponerla en el chico que se encontraba paralizado en mitad de la sala, curiosamente parecía el único que no se inmutaba por la escena que se había montado.
#26
Paul se te acerca por la espalda:
-Perdone que le interrumpa, pero he pensado que, si no le es mucha molestia, ¿podría preguntarle al señor Lothar si un servidor podría acompañarles mañana para solicitar el puesto en la guardia? Estoy seguro de que si usted se lo pide, tendré muchas más posibilidades de acceder.
El chico te sonríe amablemente.
