Es inusual ver un hilo en el subforo de Juegos que esté centrado en un MMORPG, y más si hablamos de uno que tiene su propio subforo, ¿verdad? Empecemos por el principio.
La semana pasada se puso a la venta Shadowbringers, la última expansión de Final Fantasy XIV y cuyos jugadores esperaban con ansias desde hacía tiempo, y no es para menos.
Aunque las reviews por parte de los medios especializados están tardando en llegar, lo cierto es que a día de hoy la expansión tiene un 93 de nota media en Opencritic (la nota más alta de todos los juegos que han salido este año).
Aún así el juego y la expansión han pasado muy desapercibidos para el público general, pero el boca a boca y las opiniones que se leen por las redes hacen pensar a aquellos que aún no hemos dado el paso de probarlo que estamos ante un gran MMORPG y sobre todo ante un gran Final Fantasy.
Por ello os traemos este hilo en el que gracias a la ayuda de @Nherzogs (mod del subforo de FF XIV) vamos a reunir las opiniones sinceras y los diferentes puntos de vista de seis mediavideros, así que agradecer desde aquí la participación de todos ellos:
@BahamutxD @Jetxot @Meaven @Umo @shioka @Vespers
No sé que es un MMO pero Final Fantasy XIV mola
Final Fantasy XIV es un MMO. Tiene una suscripción mensual y a pesar de eso puede que sea el mejor videojuego al que vaya a jugar jamas.
Mi aventura en FFXIV empezó hace ya 5 años. Nunca había jugado un MMO, no sabia que significaba “MMO” y el simple hecho de tener jugadores al lado mía me causaba vergüenza y stress, “pensaran que soy muy mala y se enfadaran conmigo por ello”, el simple hecho de caminar y mover la cámara ya era suficiente dificultad para mi.
Decidí darle una oportunidad a este juego dejándome aconsejar por mis amigos y lo que otros jugadores hablaban sobre el.
Avanzaba poco a poco, todo era nuevo para mi y siempre había algo que mantenía mi interés por seguir adelante. Las calles de sus ciudades eran laberintos para mi, sus personajes aunque extraños al principio pronto fueron cobrando interés, su banda sonora me relajaba al jugar.. Yo era la protagonista en un mundo que se abría ante mi y así me lo hacia sentir el juego.
Todo iba viento en popa hasta que de pronto mi siguiente misión era reunir un grupo para hacer lo que llamaban una “duty”. Eso me supuso una gran angustia.
Cuatro jugadores desconocidos unidos para completar una mazmorra. Lo que a priori parecía una tragedia anunciada, fue una de las experiencias mas gratificantes de mi vida en un videojuego. Jugadores, personas a las que no conocía de nada de repente se convirtieron en mis compañeros y mas lejos de ser amables conmigo, incluso me agradecieron por hacer las mismas cosas que había estado haciendo durante todo este tiempo yo sola.
La experiencia mas haya de ser traumática, fue alucinante. Unir fuerzas con otros jugadores para lograr un objetivo común y salir victoriosa fue un bombazo. Había derribado un muro que construí alrededor mía y compartir el viaje con otros ya no suponía una mala experiencia para mi.
La barrera del idioma fue dura tanto a la hora de seguir el hilo de la historia como para progresar con mi personaje, pero si hay algo que Final Fantasy XIV hace muy bien, es enseñar sutilmente y sin darte cuenta a dominar el juego en todos sus aspectos sin necesidad de tener que leer aburridos tutoriales. Con un poco de ayuda de mis amigos y compañeros, mi experiencia con un idioma complicado para mi, fue mucho mas llevadera.
Ahora, después de varios años jugando a Final Fantasy XIV, he terminado el juego. Se podría decir que al completo. He derrotado a los jefes mas complejos, disfrutado de gran parte de los sistemas que ofrece, tengo mi propia casa y me gusta pasar el rato jugando a los minijuegos en el parque de atracciones.
Nunca habría imaginado que algo tan sencillo como un videojuego tuviera la capacidad de emocionarme de tantas formas como lo ha conseguido Final Fantasy XIV y aun después de tanto tiempo, sigue sorprendiéndome y haciéndolo como el primer día.
Eorzea necesita un nuevo Warrior of Light y el siguiente debes de ser tu.
Odio los Final Fantasy pero juego a este
Se dice, se comenta, que Shadowbringers es el mejor Final Fantasy de los últimos 20 años. Hago números y me sale que hay que irse hasta al FF IX de finales de los 90's. La verdad es que el dato me da absolutamente igual, nunca me han gustado los Final Fantasy.
Para ser mas exactos, siempre me han parecido un coñazo. Aborrezco los combates por turnos, la estética me parece un chiste solo apto para japoneses y los romances habituales entre protagonistas me provocan cierta vergüenza ajena. Que la mitad de lo que digo es un topicazo sin fundamento, esta claro. Esta claro porque en mi vida me he pasado un FF y he trasteado, si acaso, con el FFV y el FFVII, cuando tenía 9-10 años además. Así que como he acabado jugando al FFXIV asiduamente (llevo unos 30 meses de suscripción) solo se explica por las propias virtudes del juego.
Final Fantasy XIV, como todo MMORPG, dispone de muchas excusas para acercarte a él, que uno tiene que justificar el gasto. En mi caso yo padezco del síndrome JUMPER (no confundir con WoW refugee) que por estos foros ya es conocido. Mas o menos eso consiste en saltar de MMO a MMO esperando encontrar ese juego que cumpla tus necesidades lúdicas, y normalmente esas necesidades se retrotraen a tus mejores experiencias en el género, que seguro coinciden con tu primera experiencia en un MMO. O si queréis resumirlo, no paras de buscar el mismo juego que te gusto en su día, actualizado y mejorado. Pero eso es imposible. Lo que nos gusto en su día de un MMORPG no tiene porque gustarnos hoy, por no hablar de que quizás disponemos de menos tiempo y no estamos para historias más hardcore o sandbox.
Yo venía del LOTRO (Lord of The Rings Online). En sus inicios allí uno tenía que ir con un caballo muy lento hasta la entrada de la dungeon, summonear a la party y entrar por la puerta. Ni Party Finder ni ostias. Y Swift travel los justitos por cierto. Es uno de los muchos ejemplos de cosas que en mis recuerdos parecen espectaculares pero si tuviera que hacerlo hoy día en cualquier juego sería insta-drop. La decadencia del LOTRO me hizo jumpear a muchos juegos. Guild Wars 2, Archeage, Rift, Aion, TESO... Hasta que tope con Final Fantasy XIV: A Realm Reborn.
Los inicios fueron muy jodidos porque no paraba de ver cactus bailarines, pollos gigantes por montura y una comunidad que no tenia ningún reparo en hacerse el personaje de una raza enana y cuqui. Muy ostiable todo. Todas las trabas que encontré en el camino, que no fueron pocas, las iba salvando poco poco hasta plantarme a nivel máximo ¿Como se explica esto? porque el juego, como MMORPG themepark, funciona como un reloj suizo. Y bien podría enumerar la infinidad de cosas que hace bien el juego, pero no es objetivo de este texto.
Yo he venido a hablar de Shadowbringers, de su historia y su lore, uno de los pilares del juego por cierto. Lo jodido es que hasta el 5.0 no he sido especialmente fan. A ver, esta mejor que la mayoría (mucho mejor) y la primera expansión, Heavensward, fue un salto cualitativo absoluto. Salto que se encargaron de dinamitar en la siguiente expansión, Stormblood. Y luego pues tienes algunas sidequest chulas y un lore bastante currado. Pero da igual lo bien trabajado que este todo si no hay una conexión emocional con la historia y su mundo, y ese siempre fue mi problema con FFXIV. Porque pocos juegos hay que a nivel de guión a uno le atrapen, cuesta encontrarlos, y si nos vamos a los MMO eso ya ni existe. La propia estructura del juego hace casi imposible implementar buenas historias. Entonces claro, uno se planta en mitad de Shadowbringers y de golpe te ves leyendo con ímpetu esos diálogos que siempre pasabas por alto, te ves yendo a cada NPC a ver que te puede contar sobre el lore del lugar por pura y simple curiosidad y lo mas jodido de todo, evitas spoilers por la red como un jodido poseso. Si si, spoilers en un MMORPG, nunca creí que viviría esto. Es que entro en youtube o Reddit y no paro de ver la palabra SPOILER+Shadowbringers por todos lados. Y yo aún a nivel 75, un puto sin vivir. Las similitudes con varios fenómenos televisivos están allí. Una historia larga, con una fan base detrás muy loca, que al alcanzar sus mayores cuotas de popularidad y calidad duplica su interés en las redes. Porque si, esto es como Juego de tronos, si pinchas un capitulo y ves a un tío raro meterle un ballestazo a otro que esta cagando pues te entra la risa y ya esta, pero si sigues la serie eso es un momentazo. Lo mismo podríamos aplicar en las innumerables revelaciones de Shadowbringers (eso si, quizás más enfocadas al lore y al mundo en general que a las propias relaciones entre personajes).
¿Y que ha cambiado en FFXIV para que la historia de este salto de calidad? pues el tono y el talento. Esto es una mezcla imposible entre WoW Cataclysm, Final Fantasy, Dark Souls, Bastard!!, Interstellar e incluso un toque a Walking Dead. Tan loco como parece. A ver si me explico: Hay un mundo nuevo, que es como el de siempre, pero no lo es. Lo que somos aquí es al revés de lo que somos allí. Es diferente pero hay cosas parecidas. Y entre mundos hay cierto salto espacio-tiempo. Hay pesadumbre, pesimismo, un estado de depresión general. Hay una sociedad al borde del apocalipsis, literalmente. Unos se han rendido y han abrazo su final, otros luchan, otros viven sus últimos días dándole al vicio y al pecado. Hay una maldición, algo incluso peor que la muerte. Los hay que marginan a los malditos, los hay que los cuidan hasta el final... por haber hay muchas cosas. Incluso los personajes principales, los Scions, han pasado a interesarme. Mostrando personalidades más complejas y despertando simpatías que nunca imagine (hasta me caen bien los putos gemelos ahora). Y claro, todo esto alimenta el mundo donde transcurre el juego, lo expande. Y eso, en un MMO, es la guinda.
¿Solo puedes disfrutar de Shadowbringers si te has pasado todo lo anterior? pues si, es lo que hay, pero yo creo que vale la pena. Vale mucho la pena, pues yo me vine a FFXIV por su contenido themepark, me quede por sus actualizaciones y sus mejoras constantes y finalmente me fascinó por su historia y su lore ¿existe mejor combinación?
FF XIV es un MMO que todo amante del WoW debería probar
Final Fantasy XIV es un MMO themepark, un género en el que tu personaje tiene una progresión lineal desde su creación hasta alcanzar el nivel máximo y dedicarse al distinto contenido high-end (PvE, PvP, principalmente). El themepark más conocido es World of Warcraft.
Si has sido jugador del mismo y te ha gustado el tipo de juego que ofrece, Final Fantasy XIV es una muy interesante propuesta, ya que incluye mazmorras, raids (incluidos combates denominados Ultimate con una dificultad muy alta), PvP (no especialmente bueno, pero ahí está), y otros elementos conocidos por todos, con el gran añadido de que además su historia no tiene nada que envidiar a la de muchos RPG, y en concreto, a la de otros títulos de la franquicia. Su banda sonora, apartado que no siempre tiene gran importancia en el género, también es fantástica, con auténticas obras de arte.
Si nunca has tenido la oportunidad de jugar a un MMO pero eres amante de la saga también recomendaría el juego, ya que hay numerosísimas referencias a muchos títulos de la saga (FF V, VI, VI, Tactics…) y como mencioné antes una historia y personajes que nos acompañan durante la misma como en otros juegos de la franquicia. Eso sí, tienes que tener claro que no es un single player, y aunque la historia la hagas en solitario y solamente salga tu personaje en las escenas, así como participe acompañado de NPC en ciertas batallas, las mazmorras y otras actividades a realizar durante el juego serán con otros jugadores (aunque en esta expansión se ha presentado un nuevo sistema que permite hacer mazmorras que pertenezcan a la historia principal con personajes de la misma).
Diría que es uno de los mejores MMO del mercado actualmente, y su compra ya me parece más que rentable aunque sea solamente por disfrutar de su historia. Sin embargo, si eres jugador habitual de MMO, especialmente themepark, y quieres explotar todo su potencial encontrarás unas clases en su mayoría con un diseño interesante (especialmente DPS), con rotaciones cuidadas y una dificultad de manejo y un diseño bastante más cuidado que en el WoW actual (salvo excepciones).
Además, aquí hay no hay grindeos obligatorios para raidear a buen nivel como fue el Poder de artefacto de Legión o la Azerita de Warlords of Draenor, ni RNG a la hora de equiparse, nada de Warforged/Titanforged/Sockets random, la raid tiene su tabla de loot para cada clase, asegurando además la obtención de piezas por tokens que se otorgan al matar semanalmente a los bosses, y se complementa con un equipo de chapas, que se consigue haciendo mazmorras de nivel máximo (Hola, puntos de valor/justicia, cuánto tiempo desde la fría Northrend).
El único grind que encontraremos en Final Fantasy XIV es con el fin de obtener la relic weapon de cada expansión (en Stormblood, la pasada, también hubo armadura), sin embargo solamente es BiS en el último parche de la expansión, y en absoluto necesaria para tirar el contenido, la gente la consigue fundamentalmente por su aspecto (suelen tener un diseño muy currado, y lucecitas, muchas lucecitas).
Esto personalmente supone un soplo de aire fresco para jugadores de WoW a los que les gusta el contenido de raideo y el estilo de juego pero no recibió con agrado el cambio a grindfest y sistema de equipo tipo Diablo RNG.
Sin embargo, si venís de WoW, aviso a navegantes. El sistema de combate en sus primeros niveles puede parecer lento y aburrido, es una queja muy común que he escuchado en jugadores de dicho MMO que han venido a FF XIV. Dadle una oportunidad, en niveles superiores esto cambia radicalmente y las skills fuera de GCD y los combos, entre otras cosas, quitan completamente esa sensación de lentitud del principio cuando solo tienes dos botones mal contados.
Con la historia, igual, paciencia. El principio es duro y puede parecer insulsa y poco interesante, cosa que ocurre en otros muchos RPG, incluso en algunos de los más aclamados por la crítica. Pasad el escollo inicial y no os arrepentiréis. Como ya mencioné antes una maravillosa banda sonora os acompañará durante vuestra aventura, siendo especialmente épica la música de algunos bosses y puntos de la historia (pausad Spotify y desmutear el juego, aunque sé que no estaréis acostumbrados a ello).
Bienvenidos a Eorzea, futuros Warriors of Light.
Final Fantasy XIV: Un magnífico FF, un estupendo MMORPG
FINAL FANTASY XIV es un magnífico FINAL FANTASY. Lo es porque cuenta con una historia sólida que el equipo de desarrollo del juego mima hasta el extremo, con bifurcaciones en forma de historias secundarias que potencian y realzan todo lo vivido a través de la historia principal.
Lo es porque consigue que los jugadores experimenten esa sensación de aventura que ha caracterizado a (casi) todos los juegos de la franquicia, gracias a una cuidadísima ambientación en la que cada mínimo detalle cuenta.
Lo es porque Naoki Yoshida y su equipo son fans declarados de la saga y se esfuerzan en transmitir esa pasión en cada aspecto del juego, más como jugadores que como desarrolladores.
Pero FINAL FANTASY XIV también es un MMORPG, y eso implica obligatoriamente una comunidad de jugadores que da vida y sentido a todo el universo del juego. Y la comunidad de FFXIV no es cualquier comunidad. En general, el ambiente que se respira tanto en the Source como en the First (es lo que tiene contar con, desde Shadowbringers, 2 "planetas") es tremendamente saludable, con gente más que dispuesta a ayudar a los recién llegados con sus dudas sabiendo lo abrumadora que puede resultar la cantidad de contenido disponible.
A día de hoy, la gente que viene de otros MMORPGs sigue sorprendiéndose de que los jugadores saluden al entrar en una dungeon o que incluso ofrezcan información sobre las mecánicas de los combates o consejos sobre el manejo de los diferentes jobs.
En resumen, la relación que se ha establecido entre el equipo de desarrollo (con Yoshi-P a la cabeza) y los propios jugadores es, probablemente, una de las principales claves del éxito de FINAL FANTASY XIV. Y bueno, Hildibrand también ayuda, pero eso es otra historia...
Lo que piensa Shioka WOW refugee/Hardcore rusher
A día de hoy, pocas cosas sorprenden ya en el mundo de los videojuegos y más concretamente en la saga Final Fantasy, que lejos de ir a mejor, cada entrega parece que baja el listón y que da un paso atrás. Conocí la saga con 9 años, con el FF8 y emo de Squall, al que le di la vuelta al contador de horas (si, era un niño muy viciado) y tras el, empece con el FF9 que para mi, es una verdadera joya y sin duda mi favorito.. Luego vino el Cloud y más tarde Tidus, con una historia que aún rejugue hace un par de meses en mi Switch, disfrutando como un niño pequeño.. FFXII fue el último de la saga que disfruté, ya que lo que vino detrás, en mi opinión fue en picado en cuanto a calidad se refiere.
Yo era un jugador de World of Warcraft, como la gran mayoría de gente que juega MMO y tras dejarlo al acabar Cataclysm por empezar a simplificarlo probé otros, Guild Wars 2, Black Desert Online, Tera, Aion, etc. Ninguno me llenaba, y todos destacaban en algo, pero ninguno me daba la experiencia del WoW, hasta que hace un mes caí en el FFXIV, aprovechando que me regalaran hace un tiempo una cuenta con las expansiones anteriores.
Mi historia con este juego fue una de las cosas mas inesperadas que me encontré en este mundillo, lo había probado hace un par de años y jugué dos días sin llegar a engancharme... Llegué a nivel 27, ni acabé la primera parte de historia que es un tutorial largo.. Suena mal, lo sé, pero lo mismo le dije la semana pasada a otro forero que empezaba.
Esta vez me lo tomé con ganas y en menos de esos dos días, ya había superado a mi antiguo personaje, acabando esa parte y descubriendo una historia que no solo enganchaba, si no que atacaba directamente donde duele, a los “feels” de un fan de la saga. Y digo esto, porque venía sin saber lo que me esperaba cuando de repente, lo vi todo claro, Yoshida es un verdadero genio y no solo supo arreglar un juego que empezó como una catástrofe, si no que tenía muy claro su público.
No os imagináis la cara que se me quedo cuando de repente, estaba en una batalla contra el mismísimo Ifrit, en un combate con mecánicas de verdad, donde o esquivas o te mueres, donde cada uno en la party tiene que hacer su parte o al final acabaríamos todos muertos… Se me dibujó una sonrisa, lo que llevaba tiempo buscando en un MMO que no fuese el WoW acababa de aparecer en mi pantalla, pero eso solo era el principio. Después de Ifrit vinieron muchos otros, invocaciones o bosses de distintos FF, recreados de una forma maestra y envueltos en una historia que a cada momento se hacía más interesante, con personajes con carisma y los malos... Bueno, solo decir de ellos que hacía mucho que no sentía empatía por un antagonista de un videojuego.
Tras acabarme la historia principal, llegue a Heavensward, una expansión de la que no sabía nada y que consiguió engancharme hasta el punto de decir “joder, de aquí ya no salgo”… Ya que aumenta el nivel argumental a niveles realmente altos. Con razón todo el mundo me decía que cuando llegase me iba a enamorar de ella, y tenían razón, a nivel de historia es impresionante, los bosses, los aliados, todo. Y ahí fue cuando realmente me di cuenta de que esto no era un MMO al uso, de que lo importante no era llegar al nivel máximo si no disfrutar del camino, de la historia que me estaban contando.
El listón estaba altísimo cuando llegué a Stormblood, tanto que me di cuenta de que esa expansión lo bajaba un poquito, la historia no es tan épica, pero consigue hacerte empatizar con sus protagonistas y presentarte a un antagonista que realmente se vuelve interesante a medida que avanza la expansión, por otro lado, sabes que por el mundo esta suelta una máquina que despertaste y que no te da más ganas que de encontrártela e ir a su raid. Que esa es otra, depara más de una sorpresa.
Con esto, llegué a ShadowBringers, una expansión de la que no sabía nada, no me dio tiempo al llevar unas semanas jugando, y lo que me encontré, fue algo totalmente inesperado: una historia tan buena que parece hecha por Squaresoft antes de irse a la mierda con Enix, contrapuesta a todo lo que hasta el momento nos habían contado sobre nuestro personaje. Con unos giros argumentales que me dejaron boquiabierto y con un final sublime, a la altura de los mejores FF de la primera Playstation o SNES. Mientras luchaba contra el último boss, mi mente no paraba de decirme “joder, que no se muera, que sobreviva y vuelva a darme por culo más adelante”, porque el carisma que llegan a tener ciertos personajes buenos y malos, está a otro nivel, tanto que les coges cariño y que a medida que la historia avanza, tu cabeza no deja de hacer cábalas sobre que va a pasar o quién te va a sorprender. Todo esto, acompañado de una banda sonora, que ya quisieran tener muchos juegos. Y no, no hablo de momentos puntuales, si no que cada zona tiene una melodía acorde y de gran calidad, temas como el del combate contra Titania que parece tan inocente la primera vez que lo escuchas pero que luego no dejas de tararear todo el día, o la canción final que hace más épico si cabe el combate contra ese boss que personalmente ni en mis mejores sueños podría haberme imaginado.
Para acabar creo que nadie puede imaginarse hasta que punto este juego ataca los “feels” de un fan con toda la maldad que el equipo de Yoshida pueda juntar, pero la calidad y el mimo con el que lo hacen enamora. Poder raidear a Bahamut o a Alejandro, luchar contra los Caballeros de la mesa redonda, o incluso contra el mismísimo Kefka, y todo traído de una forma exquisita es algo que, en mi opinión, pocas personas tienen el “don” de poder llevar a cabo.
MMO? Sí, pero también un autentico Final Fantasy
El título del juego es engañoso A Realm Reborn, si bien es cierto que se basa en el "renacimiento" de Eorzea, a día de hoy, sería más conveniente llamarlo A Real Reborn.
El juego en sí viene después del fracaso absoluto de FFXIV Online. un juego que fallaba por todos lados. Lo dejaremos en una jugabilidad horrenda y un sistema mal diseñado, no merece la pena ahondar en detalles.
A Yoshida le dieron un juego muerto con taras, y él consiguió lo que nadie pensaba que consiguiera, convertirlo en el buque insignia que es a día de hoy, aún con las limitaciones que le pusieron y el problema de ciertas plataformas, consiguió resurgir de sus cenizas y crear un referente en la saga Final Fantasy.
He jugado a muchos RPG's y otros tantos MMORPG's, todos con sus cosas buenas y malas, y si algo es cierto es que desde hacía un tiempo en el tema de los MMO, al final siempre había algo que me hacía dejar el juego y buscar otro que me siguiera motivando. Eso fue así hasta que un día allá en 2013 salió Final Fantasy XIV A Realm Reborn, un juego que me llamaba la atención, era un Final Fantasy y además MMO, pero me echaba para atrás el conocer el desastre que había sido Final Fantasy XIV Online. Aun así decidí darle una oportunidad viendo el potencial que supuestamente ofrecía este relanzamiento. Y conforme comencé a descubrir el mundo y las aventuras de que me deparaba me fui quedando prendada. Y así han ido pasando los años y ahora 6 años después continuo jugando y disfrutando.
Muchas veces he leído que el FFXIV no es un Final Fantasy porque es online, y lo siento pero no estoy de acuerdo en absoluto, por ello en estas líneas explicaré que la gente se equivoca, esto es un Final Fantasy en mayúsculas.
¿Por qué cualquier amante de la saga debería jugar este título?
Sin lugar a dudas estamos ante uno de los mejores Final Fantasy de la franquicia...
El juego respira Final Fantasy por los cuatro costados, la música, Soken para muchos un desconocido, se ha alzado como una bestia de compositor, simplemente es sublime, la OST es una maravilla sin más, esos combates finales con sus temas detrás te marcan y dejan huella. Temas por zonas y una ambientación muy lograda.
La Historia, la historia es digna de los mejores FF, si bien es cierto que tiene varios ritmos a lo largo de todo el juego, (ARR básicamente es un tutorial e introducción al lore, Heavensward con el que vuelve el FF épico, Stormblood por contrapartida centrado en la fragilidad humana y con un ritmo que avanza lentamente, y por último Shadowbringers, sencillamente una genialidad, supera en creces todo lo anterior, se podría hacer un standalone sólo con esta expansión).
Un lore y una historia profundos y con unos giros que te hacen reventar la cabeza y todo metido en formato themepark, lo que sirve para añadir dosis de fanservice por un tubo, y todo ello sin que parezca forzado o metido con calzador, pues se encuentra hilado en la propia trama (Knights of the Round, The Warring Triad, Ancient Library, Ivalice...).
Por último al ser un MMO tienes multitud de contenido secundario que hacer, desde el Gold Saucer con el Triple Triad y carreras de chocobos por ejemplo. El housing, las clases de gatherers y crafters que son un propio mundo en si mismas y multitud de cosas que ahora mismo no tengo tiempo de explicar.
Tan sólo añadir que este juego tiene mucho de Final Fantasy aunque sea un MMO, ya que ser un MMO no le quita calidad como FF sino que añade profundidad en este caso, con los compañeros, experiencias y recuerdos que crea en el jugador.
Si os ha picao el gusanillo recordad que os podéis pasar por el subforo de Final Fantasy XIV para toda la información relacionada sobre el juego y por el hilo general para vivir los primeros días/semanas con la expansión.