Los que tengáis ya una cierta edad y llevéis jugando a videojuegos un tiempo considerable, seguro que habéis pasado por la etapa. El momento en el que ya sea en consola o en PC, pruebes lo que pruebes, todo te parece un coñazo y no te apetece lo más mínimo jugar a nada.
A mí me pasó hace no mucho, el año pasado. Después, irónicamente, de acabar el verano y tener algo más de tiempo... nada me llamaba la atención. Instalase lo que instalase se borraba de mi disco duro al minuto. Hasta que llegó Bloodborne. Y él fue el juego que me hizo salir de esa etapa que, después de hablar con amigos y leer a gente por internet, considero que todos hemos tenido alguna vez en nuestras vidas.
Y ahora, vuelvo a estar en una de ellas, a pesar de tener una ingente cantidad de juegos en cola por jugar.
¿Y a ti, qué juego te hizo salir del hastío de no querer jugar a nada?