Varios son los factores que caracterizan a un videojuego, pero de entre todos ellos hay dos que suelen ser los que más peso tienen en la valoración global del mismo: historia y jugabilidad.
El equilibrio entre ambas partes es un tema muy complicado de conseguir para los desarrolladores: si ofreces una muy buena jugabilidad te arriesgas a que el jugador deje la parte argumental en un segundo plano, mientras que si por el contrario ofreces una muy buena historia el jugador solo va a querer seguir avanzando en la trama, olvidándose del aspecto jugable.
Pero nosotros no somos desarrolladores, somos jugadores, y como tal cada uno le damos una importancia mayor o menor a estas dos características.
¿Prefieres un juego con una jugabilidad excelente y con una historia casi inexistente, o por el contrario una muy buena historia pero con una jugabilidad mediocre?