Como estaba prometido, Sony ha emitido una larguísima y aburridísima presentación de Mark Cerny sobre el hardware de PlayStation 5, con infinidad de pequeños detalles orientados a la audiencia original, que iban a ser los asistentes a la Game Developers Conference de San Francisco.
El resumen, al menos mirando especificaciones y comparándolas con las de Xbox Series X, es que PlayStation 5 será menos potente que su principal competidora en prácticamente todos los aspectos.
| PlayStation 5 | Xbox Series X | |
|---|---|---|
| CPU | 8 núcleos de Zen 2 a 3,5 GHz | 8 núcleos de Zen 2 3,8 GHz (3,66 GHz con SMT) |
| GPU | RDNA 2, 10,28 TFLOP, 36 CU a 2,23 GHz (frecuencia variable) | RDNA 2, 12 TFLOP, 52 CU a 1,825 GHz |
| Memoria/interfaz | 16 GB GDDR6/256-bit | 16 GB GDDR6 con bus de 320mb |
| Ancho de banda de memoria | 448 GB/s | 10 GB a 560 GB/s, 6 GB a 336 GB/s |
| Almacenamiento interno | SSD NVMe personalizado de 825 GB | SSD NVMe personalizado de 1 TB |
| Rendimiento de IO | 5,5 GB/s (brutos), 8-9 GB/s (comprimidos) | 2,4 GB/s (brutos), 4,8 GB/s (comprimidos, con bloque de descompresión por hardware) |
| Almacenamiento expandible | Puerto NVMe SSD | Tarjeta de expansión de 1 TB |
| Almacenamiento externo | Soporte para discos duros USB | Soporte para discos duros USB 3.2 |
| Unidad óptica | 4K UHD Blu-ray | 4K UHD Blu-Ray |
No solo sus números brutos son menores, sino que la refrigeración parece que va a ser un factor muy limitante para la consola de Sony, probablemente porque han optado por un diseño externo más tradicional respecto al de Xbox Series X.
Según explican en Digital Foundry, PlayStation 5 no funcionará a una frecuencia fija. En su lugar, usará como base la máxima frecuencia que es capaz de conseguir y la variará dependiendo de las condiciones de temperatura. Esto quiere decir que, por primera vez en una consola, la tasa de frames de un juego podrá variar dependiendo de la temperatura externa, algo que los desarrolladores tendrán que tener muy en cuenta.
La única excepción es en el almacenamiento, donde Sony ha puesto mucho énfasis con unas tasas de transferencia que llegan a los 5,5 GB/s. Además, PlayStation 5 permitirá usar SSD NVMe estándar para expandirlo, en lugar del formato propietario de Microsoft.
La pega es que Sony tendrá que certificar cada unidad de SSD NVMe para que funcione en PS5 y que ahora mismo no hay ningún modelo en el mercado suficientemente rápido, así que no os lancéis a comprar un SSD todavía.
Retrocompatibilidad limitada
Además de las especificaciones, Sony ha dado los primeros detalles sobre la retrocompatibilidad, que difiere mucho de lo que se rumoreaba en los últimos meses.
PlayStation 5 no correrá juegos de PSX, PS2 o PS3, y no tendrá retrocompatibilidad completa con los juegos de PlayStation 4. De salida, Sony espera que casi todos los 100 juegos más jugados funcionen sin problemas en PS5.
