Había dejado el libro aparcado porque me aburría y lo he retomado hace un par de días. El caso es que casi creo haber perdido el tiempo al leerlo. Tiene dos o otres momentos en los que Roth llega a crear cierto clímax y poco más. El desarrollo y el trato al lector es casi insultante. Parece que estuviese escrito para gente estúpida con una concepción maniquea de la vida. Destila victimismo judío por todos los costados.
PD: Por destacar algo positivo he de decir que en algunos momentos logra plasmar decentemente las preocupaciones de un niño en una situación así y cómo lo trivial se vuelve trascendente y viceversa. Hay un momento en concreto que me arrancó una sonrisa