El pequeño estudio italiano Vae Victis presentó en la gamescom de Colonia su primer título, un juego gratis de conducción para todos los públicos, con toques masivos y muchas posibilidades de personalización.
Victory: The Age of Racing nos coloca en un mundo en el que el gobierno ha quitado la libertad de conducir a los humanos y les ha impuesto un sistema llamado Drivenet que controla todo el tráfico mundial. Por supuesto, como si de los rebeldes de Matrix se tratase, un grupo de ciudadanos ha escapado de la vigilancia y ha creado un movimiento para restaurar la emoción de las carreras.
Ya en lo que realmente importa, al ver los primeros vídeos y capturas puede dar la impresión de ser un TrackMania F2P, pero Victory es un término medio entre la simpleza de los juegos más arcade y la complejidad de los más realistas. Según Vae Victis, su idea es que cualquiera pueda jugar y disfrutarlo, y para ello han añadido tres estilos de conducción: uno amateur, uno semi-pro y otro profesional. En el modo amateur prácticamente no tendremos ni que frenar, pero en el profesional cualquier jugador ocasional sufrirá para llegar a la meta.
Pero no solo el estilo influye en cómo se maneja el coche. Lo importante será construir, mejorar y decorar nuestro bólido comprándole piezas.
Para conseguilas, Victory tiene mercado en el que gastarnos los puntos que ganemos --o compremos-- con cientos de opciones que mejoran los atributos del coche o le añaden estilo. Por ahora en este mercado no comerciaremos con otros jugadores, pero Vae Victis ya ha prometido que es uno de los añadidos que tienen previstos para un futuro.
Antes de que nadie se queje, el juego tiene dos modos, ZeroPP y RandomPP, en los que competiremos en igualdad de condiciones contra el resto, bien sin mejoras o bien con un set de mejoras aleatorio.
Todo esto viene dentro de un paquete online muy completo, con servidores dedicados y P2P, rankings, torneos, logros y retos que dan dinero o experiencia, con tres tipos de circuitos distintos, requisitos muy asequibles e incluso con un sistema para simular giros analógicos con el teclado.