Continuando con la saga de nuestros discos imprescindibles que se inició esta semana en MV, y en nuestro afán por abrir nuevos horizontes musicales a todos los miembros del foro, os traigo hoy un disco totalmente diferente a los que suponían los dos primeros capítulos. Pudiendo catalogarlo como punk, rock alternativo (¿¿?? nunca me ha gustado lo de “alternativo”), post-hardcore, emo, y todas las variantes de juntar estos tags entre sí, os presento en esta entrega al grupo Billy Talent, y en concreto, su disco Billy Talent II.
En 1993, cuatro chavales canadienses (Benjamin Kowalewicz, Ian D'sa, Jon Gallant y Aaron Solowoniuk) formaron el grupo Pezz, que comenzó a hacerse un hueco en el panorama canadiense en 1998, tras numerosas maquetas y demos, con la salida al mercado de “Watoosh!”, disco que tuvo buena aceptación aunque no tan buen nivel de ventas.
Tras este primer intento, otro grupo que ya había registrado el nombre de Pezz, amenazó con demandar al grupo, lo que propició el cambio a Billy Talent, nombre inspirado en un personaje de la novela “Hard Core Logo” de Michael Turner. Así comenzó su andadura Billy Talent, consiguiendo tras el lanzamiento en 2003 del disco homónimo un inesperado y sorprendente éxito y reconocimiento internacional, que les llevó a acompañar a grupos como Rise Against o Muse.
Tracklist:
- Devil in a Midnight Mass
- Red Flag
- This Suffering
- Worker Bees
- Pins and Needles
- Fallen Leaves
- Where Is the Line?
- Covered in Cowardice
- Surrender
- In The Fall (conocida también como The Navy Song)
- Perfect World
- Sympathy
- Burn the Evidence
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El 27 de junio de 2006 veía la luz el segundo trabajo de estudio del grupo bajo la nueva denominación. El disco seguía la pauta marcada por el primero, letras cargadas de fuerza y con melodías pegadizas y animosas, si bien se observa una cierta evolución, perdiendo algo de energía en favor del mensaje, ya que tratan de cargar las líricas con mensajes de la vida real.
El resultado es un disco que engancha desde la primera escucha, se disfruta sobremanera, ya que resulta una sucesión de temas pegadizos que mantiene un nivel increíble de principio a fin. Un sonido fruto de la evolución del punk-rock y el post-hardcore, que crece y engancha gracias a la voz tan peculiar de Ben y a unos coros muy “cantables”.
Se inicia el disco con una potente y sorprendente “Devil in a Midnight Mass”, que ya da una idea de como va a ser el resto del disco. Derrocha fuerza, y una vez más, la voz de Ben eleva aún más el nivel de la composición. A continuación, y sin descanso alguno, otra gran descarga con una de las canciones más conocidas y más exitosas del grupo: “Red Flag”, que ofrece otra inyección de energía, y que en directo llega mucho más aún.
El nivel se mantiene con la tercera, la que para mi sea posiblemente la mejor canción del disco, “This Suffering”. Con un estribillo pegadizo, los característicos coros del grupo... una canción recomendadísima. Para completar un póker de arranque muy bueno, llega después “Worker Bees”.
A partir de aquí, la parte central del disco entremezcla canciones animosas de buen nivel (pero que quizá se quedan algo cortas comparadas con el resto de canciones que componen el trabajo, como pueden ser “Perfect World” o “In the Fall”), con otras pegadizas muy al estilo de las iniciales (“Covered in Cowardice”) y con baladas muy logradas, sobretodo teniendo en cuenta el género que estamos tocando, y que es algo que diferencia a Billy Talent del resto de grupos de corte parecido. Se mueven ágilmente en varios registros, como demuestran las fantásticas “Pins and Needles” y “Surrender”.
Para terminar de cerrar el círculo, tras el respiro central, el disco se completa con las potentes y enérgicas “Sympathy” y “Burn the evidence”, que suponen un cierre magnífico. La escucha del disco proporciona ese “subidón” de ánimo y de fuerzas que yo busco la gran mayoría del tiempo, ya que es un álbum animoso y alegre, y que realmente entretiene y, en mi caso, me atrapa y contagia. Espero que a vosotros os transmita las mismas emociones y os guste el disco.
