Recientemente, Christopher Dottie, director regional de Hays para el Sur de Europa, indicó en la presentación de la Guía del mercado laboral de 2023 que si bien en España no se había producido un fenómeno similar al de la ‘Gran Renuncia’ EE.UU, la compañía estaba detectando ahora un aumento del ‘quiet quitting’, ‘loud quitting’ y ‘rage applying’ en nuestro país.
Estos fenómenos no son nuevos, sin embargo, se han popularizado en los últimos años debido a vídeos de jóvenes en plataformas como TikTok que, con un tono jocoso, los explican y parodian. Por otra parte, hay tendencias en el mercado laboral propias de las nuevas generaciones: numerosos estudios apuntan a que la mayoría de los asalariados más jóvenes planean dejar su trabajo este año.
Los más jóvenes lo tienen claro. CNBC publicó un artículo el pasado mes de enero en el que citaba un informe realizado por LinkedIn y CensusWide en diciembre de 2022 que indicaba que el 72% de los trabajadores estadounidenses encuestados pertenecientes a la generación Z (de 18 a 25 años) tenían intención de cambiar un trabajo en los 12 meses siguientes.
Diferencias generacionales. Además, este porcentaje era del 66% entre los asalariados ‘millenials’ (de 26 a 41 años), mientras que entre los empleados de las generaciones X (de 42 a 57 años) y del Baby Boom (de 58 a 76 años) dicho porcentaje era del 55% y del 30% respectivamente.
El salario es la principal razón. Por otro lado, Bloomberg ha citado recientemente un estudio de LinkedIn que señala que el 80% de los trabajadores de la generación Zen Reino Unido planea cambiar de trabajo, siendo la mejora salarial la principal razón para ello.
Inquietudes de los jóvenes. En este sentido, el informe ‘The Deloitte Global 2022 Gen Z and Millenial Survey’ señaló que el salario fue la principal razón que llevó a los trabajadores de las generaciones Z y ‘millenial’ de todo el mundo a dejar su trabajo en 2022, seguida por la conciliación entre la vida laboral y privada y, en tercer lugar, por la falta de crecimiento en la empresa.
La vida está cara. Son datos que se comprenden mejor si se tiene en cuenta que el coste de la vida era la principal preocupación de estos jóvenes, según la investigación de la consultora. De hecho, el 46% de los ‘Gen Z’ y el 47% de los ‘millenials’ afirmaban vivir “de sueldo en sueldo” (‘paycheck to paycheck’ en inglés), es decir, sin margen para ahorrar debido a los gastos que debían afrontar. En otras palabras: los trabajadores más jóvenes buscan nuevos empleos para escapar de la precariedad laboral.
España: juventud precaria. En nuestro país, los jóvenes sufren este problema de primera mano. España es el país con más paro juvenil de la UE, con un 29,3%, según datos de Eurostat, y posee la segunda tasa de temporalidad más alta del Viejo Continente, a pesar de que la diferencia con la media de la UE se ha reducido y es, actualmente, la más baja de la historia.
Salarios bajos y dificultad para emanciparse. En este contexto, es lógico que las inquietudes de los jóvenes españoles estén relacionadas con las condiciones del mercado laboral. Según un informe publicado en septiembre de 2022 por el Centro Reina Sofía sobre adolescencia y juventud, las principales preocupaciones de los jóvenes son los salarios bajos (37,8%), la precariedad laboral (30,4%), la dificultad para emanciparse (29,5%), el paro (24,6%) y la falta de confianza de la sociedad hacia ellos mismos (24,9%).
Marcharse es otra opción. Con estos elementos, no sorprende que los jóvenes busquen mejorar su situación y quieran cambiar de trabajo. Muchos de ellos, de hecho, plantean marcharse de nuestro país: según el informe ‘Jóvenes en Iberoamérica 2021’, el 74% de los jóvenes españoles encuestados se planteaban emigrar a otro país para mejorar sus condiciones de vida.
Sin duda, estamos ante un claro cambio de paradigma. Hace años se veía muy mal saltar de una empresa a otra, tildando a los que hacían esto de "mercenarios" y avisando de que estar 1-2 años en cada empleo era una red flag para quien revisara tu curriculum. Cada vez está más aceptado que los trabajos no son para estar décadas haciendo carrera, por la gran dificultad para ascender y ser recompensado por el esfuerzo continuado, además de que resulta más sencillo obtener una experiencia variada y mayor progreso salarial buscando una mejora en otro lugar una vez te estancas en el mismo puesto y los jefes no tienen ninguna intención de permitirte crecer asumiendo nuevos proyectos y responsabilidades (o que los asumas, pero por el mismo salario).