#207 Si el ser que más te ama en el mundo es un perro, tienes un problema. Sabemos que las relaciones humanas son más complejas. Un animal, concretamente un perro, te querrá si le alimentas, le sacas a pasear, si pasas tiempo con él,etc. Los humanos son más complejos que eso, para profesar amor tienen que haber otras cualidades, más complejas, que un perro no sabe apreciar.
Es fácil establecer una relación con un perro, el perro tiene deseos sencillos, no te va a discutir si un día llegas tarde a casa, de borrachera, o si te pasas toda la tarde jugando al Wow, tampoco te reñirá si fumas mucho, o comes muchas comidas grasientas, al perro todo eso le da igual. Es fácil pensar que ese amor es genuino e incondicional cuando en verdad es generado por dependecia. Y claro, es fácil establecer una relación con un ser que te ve y te admira como a un dios antes que con una persona, que ve varios niveles de ti que el perro no ve.
Siempre que encuentro una persona que dice querer más a su mascota que a nadie o ser querido más por su mascota que por nadie me pregunto si detrás no hay un desengaño. O sea, me imagino a esa persona volcándose en una relación de pareja, familiar, de amistad, etc con alguien que lo traicionó, haciéndola tanto daño que desde ese momento perdió toda la fe en la humanidad y las relaciones entre ellas, cobijandose en el amor confortable y sencillo que puede obtenerse de un animal, algo menos complejo y que nunca falla.
Y veo miedo, tienen miedo a que les hagan daño y por eso bajan la empatía al mínimo, para no volver a sufrir, dirigiendo sus emociones más intensas hacía seres que no pueden comprenderlas, pero que tampoco pueden herirles.
Hasta aquí me película.