Matar a los símbolos, para ganar rédito electoral, mientras el franquismo sociológico y su relato fantasioso de su etapa histórica sigue más vivo que nunca. Vamos ahí los socialmemócratas, haciendo el canelo y el trabajo sucio al posfranquismo.
Lo más gracioso son los llantos de "Y LO COMUNISTAH PA CUANDO?!", haciendo ver que la sociedad actual y el panorama político se ha derechizado más allá incluso de lo que estaba el posfranquismo en el 77. Adolfo Suárez, esa figura mitificada hasta la náusea por la derecha española y los socialmemócratas, parecería un puto hippie hoy en día a los ojos de muchos.