Una británica acoge a un “menor” afgano en su casa y termina llamando a la policía para que se lo lleven tras ser agredida
Ha aparecido en la prensa británica con el nombre ficticio de “Julie”. El miércoles contó su experiencia de terror en “Loose Women”, un programa de entrevistas para las mujeres difundidas por la cadena británica ITV.
Julie relató cómo se hizo cargo de Abdul, un adolescente que decía proceder de un campo de refugiados de Afganistán. Lo acogió en su propia casa y atendió a todas sus necesidades. “Pensé que necesitaba una casa y que estaba falta de afecto”, explicó en el programa.
Los problemas comenzaron cuando llevó a su “hijo adoptivo” al dentista. Basándose en su dentadura, los odontólogos determinaron que el afgano tenía más de 18 años. “Al principio era muy tímido, educado y humilde, luego cambió su caracter”. No tardaron en aflorar las primeras mentiras. Abdul decía que su familia había sido retenida en Bélgica, lo que las autoridades británicas desmintieron. Abdul comenzó a mostrarse extremadamente agresivo no sólamente con Julie, sino también con sus dos hijos.
“Comenzó a amenazarnos. Me causaba tanto miedo que evitaba quedarme a solas con él. Pronto comenzó a golpear a mis hijos y también a mí. Llamé a la policía para que se lo llevaran. Antes de salir de casa detenido, se volvió a mí para decirme: ‘os voy a matar a todos, sé donde vives”, explicó Julie.
Tras su detención por la policía, Julie descubrió que Abdul había estado utilizando internet para acceder a páginas yihadistas. “Está claro que nos mintió no sólo en la edad”, ´se lamentó.
Entre tanto, Julie dijo vivir aterrada. Como primera medida ha cambiado las cerraduras de su vivienda y apeló a la primera ministra británica, Theresa May, a endurecer la política de inmigración y ejercer un mayor control sobre las personas que están siendo autorizadas a entrar en el país.
“El buenismo con sangre se cura”, podría ser un buen corolario para rematar la historia que ha tenido como protagonista a Julie.