La única línea que estaba terminada y en funcionamiento en el año 1850 era la de Barcelona a Mataró, con una longitud de unos 29 kilómetros. Su construcción se había emprendido por una sociedad local, la Gran Compañía Española del Camino de Hierro de Barcelona a Mataró y viceversa bajo la protección de S.M la Reina Madre, doña María Cristina, compañía en la que predominaba capital nacional. La dirección de la obra, sin embargo, estaba en manos de ingenieros británicos, el material rodante y el equipo eran también británicos y las operaciones comerciales y financieras estaban también a cargo de una firma británica, la Mackeinzie & Brassey, que tenía una participación en el ferrocarril.
Y profundizando un poco más he visto que también intervino en la construcción Thomas Brassey & Co y la Catalana General de Crédito (empresa bancaria española), pero nada de Biada y demás. En fin, que me fio más de Tortella, Weis y Middlemas más los correspondientes balances que presentan que de vosotros y la wikipedia, la verdad.