Seguramente habrás oído hablar de la arquitectura de Antoni Gaudí; de las playas de la Costa Brava; de la marcha de Ibiza; del Fútbol Club Barcelona; del jugador de la NBA Pau Gasol; de las Fallas de Valencia; o de la lucha de esta tierra por conseguir su libertad.
Los Países Catalanes están formados por el Principado de Cataluña, el País Valenciano, las Islas Baleares -territorios bajo administración del Estado Español-, y la Cataluña Norte -en el Estado Francés-.
Así pues, a continuación tienes la oportunidad de conocer brevemente un punto de vista desconocido de la realidad. Una historia silenciada por España. Es un país que lucha desde hace siglos por sus derechos y su libertad.
Países Catalanes.
La extensión de Cataluña es de 69.823 kilómetros cuadrados, un territorio más extenso que Albania, Bélgica, Dinamarca, Holanda, Luxemburgo y Suiza, entre otros más. Actualmente, en territorio catalán, viven más de 11 millones de habitantes.
Los Países Catalanes se encuentran divididos administrativamente por el Estado Español en tres regiones: Principado de Cataluña (cuatro provincias), País Valenciano (tres provincias) y las Islas Baleares (una provincia). En Francia, la Cataluña Norte constituye la mayor parte del departamento de los Pirineos-Orientales. Este Departamento forma parte de la región Lenguadoc-Rosellón. Además, en el norte se encuentra Andorra, estado libre y autónomo políticamente.
La Senyera: nuestra bandera.
La señal de los palos (la bandera de las cuatro barras) aparece por vez primera encima del escudo de Ramon Berenguer IV (Siglo XII). Respondía a una señal de linaje. Pero el país, poco a poco, lo tomará como suyo, hasta convertirse en una de las primeras banderas nacionales. Así pues, la bandera catalana es una de las enseñas más antiguas de Europa.
Su exhibición en público ha resultado sancionada y perseguida por los diferentes reinados y gobiernos españoles durante muchos años.
La Estelada: la bandera de la libertad.
La Estelada, nacida en el año 1928 es la bandera que simboliza la lucha por la libertad. El triángulo azul representa el cielo azul de la humanidad y en su centro luce la estrella blanca que representa los deseos de Cataluña de poder decidir su futuro como pueblo.
En el año 1969 aparece la estelada con la estrella roja, de tendencia socialista.
Actualmente las dos banderas son usadas indiferentemente por las diversas organizaciones, colectivos y partidos políticos de los Países Catalanes.
El Catalán: nuestra lengua.
La lengua catalana es el exponente más claro que somos una nación y una de nuestras características como pueblo. Nuestra lengua, que desciende del latín vulgar, a partir del siglo XII se consolidó en la administración, la literatura y la ciencia.
A partir del reinado de Jaume I, el catalán se extiende por todos los rincones de la nación catalana, de Salses a Guardamar y de Fraga a Mahón, límites geográficos de los territorios que forman los Países Catalanes. A lo largo de los siglos, la lengua catalana fue la única lengua privada, pública y oficial de toda la Nación Catalana.
Con la desaparición del Imperio Romano, el latín dio paso a nuevas lenguas. Así pues, en el siglo VIII, se considera que nacen las lenguas conocidas como románicas. Y entres éstas, el catalán.
Aún siendo la lengua natural del país, el catalán ha sido perseguido por los estados Español y Francés mediante prohibiciones, decretos reales, dictaduras, gobiernos y reinados que han tenido un único y común objetivo: eliminar el hecho diferenciador e intentar la asimilación de Cataluña a España.
Actualmente, el uso oficial del catalán es compartido con el castellano en los Países Catalanes, excepto en la Cataluña Norte, lugar donde no tiene ningún estatus de oficialidad. En Andorra, el catalán siempre ha sido idioma único y oficial.
A pesar de su oficialidad, el catalán es agredido continuamente y su conocimiento es voluntario según la Constitución española mientras que el francés o el castellano se han de conocer obligatoriamente.
Historia de una resistencia.
En el año 1640 se inicia la Guerra de los Segadores. Cataluña lucha contra las pretensiones anexionistas de Francia y el centralismo castellano y la presencia de su ejército en nuestro país, considerándolo como base de operaciones. La guerra comportó la derrota de Cataluña y la firma del Tratado de los Pirineos (1659) por lo que las comarcas del Rosellón, el Conflent, el Vallespir y la Alta Cerdaña pasaban a depender de Francia. Todo lo que era catalán queda sin reconocimiento ni derecho alguno.
Años más tarde, entre el 1707 y el 1714, Cataluña se enfrentó al rey castellano Felipe V de Borbón, en la mencionada Guerra de Sucesión. La derrota que sufrieron nuestros antepasados significó definitivamente la anexión de los Países Catalanes al Reino de Castilla -a España- perdiendo su libertad e indepedencia. Habiendo ganado Felipe V la guerra, se promulgaron decretos en el País Valenciano, las Islas Baleares y el Principado de Cataluña. Con estos reglamentos se inició una nueva etapa de profundas y nefastas repercusiones en la historia política y lingüística de los Países Catalanes: se abolió el régimen jurídico propio, desaparecieron todas las instituciones de autogobierno, se impusieron las leyes de Castilla, se prohibió el uso del catalán en la vida pública y oficial y un largo etcétera de medidas drásticas que aún siendo aplicadas con dureza y represión no consiguieron aniquilar la lengua, la cultura y la personalidad nacional de Cataluña.
En el año 1939, el triunfo del golpe de estado del dictador fascista Francisco Franco, supuso otra vez la pérdida de las libertades e instituciones propias de los Países Catalanes que se habían recuperado tímidamente a principios de la década de los años 30 del siglo XX. Desde 1939 hasta 1975 se llevó otra vez a cabo una fuerte represión contra la cultura y, sobretodo, contra la lengua catalana. El catalán desapareció de todos los organismos públicos, se prohibió el uso y se privó la enseñanza del catalán en la escuela. Las instituciones culturales de la Generalitat (Gobierno autónomo de Cataluña) fueron clausuradas.
A petición del dictador Francisco Franco, el Presidente de Cataluña elegido democráticamente por votación de los ciudadanos de Cataluña, Lluís Companys, fue capturado y entregado a España por la Gestapo, en el verano de 1940. En Madrid fue interrogado y torturado salvajemente. Finalmente, fue fusilado en el cementerio de Santa Eulalia del Castillo de Montjuic, en Barcelona, el 15 de octubre de 1940. El Presidente Companys dio la vida con un ejemplo de patriotismo, de lealtad a Cataluña: con los pies descalzos, para estar en contacto con la tierra catalana, murió gritando "¡Por Cataluña!".
La persecución contra todo lo que hiciera referencia al catalanismo fue criminal y absoluta: los himnos, los escudos y las banderas propias también fueron prohibidos. Las bibliotecas fueron "depuradas" y los libros en catalán quemados o confiscados, al igual que los archivos. El castellano se impuso en todos los servicios públicos y como lengua única. Se obligó a cambiar los nombres de las personas, asociaciones, establecimientos, de calles y ciudades. Las personas que mostraron signos de catalanidad o de haber formado parte del gobierno catalán elegido por la voluntad popular fueron encarcelados, asesinados o tuvieron que exiliarse.
Sabias que...
....la bandera catalana -cuatro barras rojas en fondo amarillo- es de las más antiguas de Europa.
....Cataluña fue un país independiente y libre hasta el año 1714.
....la crueldad de los castellanos llegó a tal extremo que expuso durante 12 años la cabeza cortada de uno de los principales generales de la resistencia catalana de 1714 -el general Moragues- para infundir el miedo entre la población catalana.
....la lengua catalana ha estado sistemáticamente perseguida y boicoteada por los gobernantes españoles desde 1714.
....el primer bombardeo sobre población civil en Europa lo sufrieron los ciudadanos de Barcelona y en el que murieron millares.
....el arquitecto modernista Antoni Gaudí fue perseguido y detenido por hablar en catalán.
....Josep Sunyol, Presidente del Fútbol Club Barcelona, fue fusilado sin juicio en Guadarrama (España), por el ejército de Franco en el año 1936.
....y que también durante aquellos años alrededor de 150.000 catalanes fueron encarcelados en campos de concentración o prisiones, a menudo improvisadas.
....el Presidente legítimo de Cataluña, Lluís Companys, fue detenido por los nazis en Bretaña, entregado al Estado Español, encarcelado, torturado y fusilado en el año 1940 por un batallón del Ejército español, el único Presidente democráticamente elegido que fue ejecutado en Europa en los años 40.
....en el campo de concentración de Mauthausen murieron millares de catalanes y catalanas que Franco condenó como "no españoles".
....Franco robó de Cataluña y de otras áreas republicanas ocupadas todos los documentos oficiales de sus instituciones oficiales, ayuntamientos, sindicatos y partidos democráticos para su escrutinio policial y todavía no los han devuelto, reteniéndolos en Salamanca en contra de los criterios de la UNESCO.
....durante el franquismo (1939-1975), en los Países Catalanes, 95.000 ciudadanos fueron juzgados por consejos de guerra bajo acusaciones de aspecto político, fueron ejecutadas unas 12.000 personas y 200.000 se vieron obligadas a marcharse al exilio.
....Amnistía Internacional, el comité especial contra la tortura de la ONU y el Comité por la Prevención de la Tortura del Consejo de Europa denuncian habitualmente la práctica de la tortura en el Estado español al igual que la impunidad con la que se mueven sus responsables.
....el Estado Español ha sido denunciado por la tortura a independentistas en 1992 y está siendo juzgado por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo. Una sentencia anterior del mismo Tribunal ya había condenado a España a indemnizar a independentistas catalanes por haber sido juzgados sin garantía alguna.
....desde el año 1978 más de 1000 independentistas catalanes han sido detenidos por los diferentes cuerpos policiales del Estado.
....si alguna vez se revisa la situación de Gibraltar respecto al Estado español y Gran Bretaña, también se debería revisar la situación de Catalunya por lo que respecta a España, porque el mismo Tratado posbélico dicta los mismos desde 1714.
La Autodeterminación, un derecho deseado por un pueblo, pero negado por los opresores.
Cataluña tiene un derecho natural, histórico y político, reconocido internacionalmente en las naciones: la autodeterminación. Si la voluntad de las catalanas y los catalanes es ir más allá de la autonomía, tiene derecho a la total independencia de su organización política y gobierno. Las autoridades francesas y españolas han cometido incontables injusticias históricas. En este agravio se encuentra, en gran medida, la base moral de la independencia nacional de Cataluña. Con los actuales estados español y francés, Cataluña siempre tendrá el derecho a reclamar la libertad nacional, completamente lícita e injustamente negada.
Hoy en día, España y Francia son considerados estados democráticos en el concierto internacional. Pero no significa que Cataluña viva en democracia. Ni la constitución francesa ni la española aceptan el derecho a la autodeterminación. El derecho a la libre determinación es un acto por el que un pueblo decide su destino político. Este derecho colectivo está por encima de todas las leyes y constituciones, por encima de las instituciones. Del mismo modo que nadie, ni ninguna persona, ni organismo alguno ni estado puede negar el derecho a vivir, tampoco se puede negar el derecho de un pueblo a decidir su futuro en libertad.
A la Nación Catalana no se le permite decidir su futuro. Se le niega la posibilidad de tener sus propias instituciones nacionales y hacer oír su voz en las internacionales. Se le impone la legalidad española y francesa mientras decrece día a día el uso del catalán en la calle. Se le niega la posibilidad de competir deportivamente con equipo propio y bajo su bandera aún siendo una reconocida potencia a nivel mundial. Somos muchas y muchos las catalanas y los catalanes que creemos necesario el reconocimiento de Cataluña como pueblo soberano. Que sea la palabra del pueblo, de la gente, la que marque libremente un horizonte de futuro en convivencia, paz y tolerancia.
Es por esto que nuestra opción independentista es democrática. Queremos tener derecho a decidir para vivir en total libertad y como estado independiente, justo y solidario.