#329 Llevo diciendo cientos de veces que sí, que tengo mi vida fuera del piso, con gente que me cae bien y 2 amigos de verdad. Que me basta con eso y mi familia. Pero que cuando llego a mi casa, después de un día largo y rodeado de gente (tanto si te caen bien o no, muchas horas de socialización son una carga para nosotros y necesitamos reparar energías en solitario), solamente me apetece descansar. No seguir dedicando 2 ó 3 horas más a hablar con unas compañeras de piso que ni me aportan nada, y que solamente basta escucharlas hablar todo el día entre ellas para darse cuenta de cuán profundo es su interior y sus conversaciones.
Y respecto a lo demás, la mayoría de personas que, realmente, han aportado algo a la humanidad, eran introvertidos.