Lo de la heroína por cierto fue un fenómeno muy virulento en algunas zonas. En la zona del extraradio de Valencia pegó de una forma muy muy fuerte. Y yo aún me hago cruces sobre como la gente estaba tan mal de la puta cabeza para pincharse jaco. La gente pasaba de fumarse sus cigars en la parte trasera del colegio a hacerse sus chinos y cuando la falta de dinero apretaba , a picarse, ya que con el caballo de una platina podían pincharse 3 o 4 veces.
Tengo el recuerdo de ver jeringuillas por la calle como hoy en día se ven colillas. Los yonkis se pinchaban en cualquier sitio , no tenian pudor ninguno: en un portal, entre 2 coches, en la puerta de un garaje....Como bien se dice se perdió una generación entera, compañeros míos de clase se metieron en esa mierda y terminaron en psiquiátricos o directamente muertos.
Para más INRI no existía información alguna. Los padres no sabían nada, mas allá de que la droga era mala , pero no se conocía ni como funcionaba , ni que hacer cuando descubrías que tu hijo era un yonki , nada. De mala manera se empezó a tratar desde la psiquiatría y comenzaron a aparecer grupos de terapia en ambulatorios, ya que para colmo , existía una especie de tabú social , un pudor con todo lo que se relacionaba con la droga.
Los mensajes que recibían los niños de aquella época eran diametralmente contradictorios, por la industria del ocio y de la música drogarte no era algo complementario , era algo inherente. Ir a una discoteca ( ejemplo, la mítica ruta del bacalao ) implicaba si o si meterte ,ya que el ritmo y la experiencia completa exigían drogarte. La música de aquella época era apología pura y dura jajaja. Luego esta subcultura se mezclaba con la infancia de una manera muy chunga, por ejemplo recuerdo comprar chicles en el kiosko con pegatinas de logos de discotecas. Con premios directos en forma de entrada que podías canjear en el momento para ir a la Spook , la Puzzle o la ACTV. Con nueve años niños con entradas para discotecas. Demencial jajaja.
En resumen, como bien se dice más atras, ir a jugar a la pelota al descampado ( por que parques prácticamente no existían ) implicaba tener que limpiarlo antes de agujas y papeles de plata requemados.